El Papa declara beatos a 2 mártires de los totalitarismos y venerable a Goursat, creador de Emmanuel
Este miércoles, durante la audiencia con el cardenal prefecto Marcello Semeraro, el Papa Francisco aprobó los votos favorables de los cardenales y obispos miembros del Dicasterio para las Causas de los Santos y decretó la extensión a la Iglesia universal del culto a las 16 carmelitas descalzas de Compiègne, guillotinadas en París in odium Fidei. También autorizó al Dicasterio a promulgar los decretos relativos a la beatificación de dos mártires, el arzobispo Eduardo Profittlich y el sacerdote Elia Comini. Además, se vuelven venerables los siervos de Dios Áron Márton, obispo, Giuseppe Maria Leone, sacerdote, y Pierre Goursat, laico francés.
Beato Eduardo Profittlich
Durante la misma audiencia, Francisco también autorizó al Dicasterio a promulgar el decreto sobre el martirio del siervo de Dios Eduardo Profittlich, de la Compañía de Jesús, arzobispo titular de Adrianópolis y administrador apostólico de Estonia.
Nacido el 11 de septiembre de 1890 en Birresdorf, Alemania, el siervo de Dios de la Compañía de Jesús, arzobispo titular de Adrianópolis y administrador apostólico de Estonia falleció el 22 de febrero de 1942, debido a las torturas sufridas en prisión en Kirov (Rusia).
Criado en una familia numerosa, en 1913 ingresó en el noviciado jesuita de Heerenberg en Holanda.
Con el estallido de la Primera Guerra Mundial fue llamado al ejército alemán, reanudando sus estudios de filosofía y teología y convirtiéndose en sacerdote concluida la conflagración, el 27 de agosto de 1922.
El 11 de mayo de 1931 fue nombrado administrador apostólico de Estonia por Pío XI, donde impulsó la comunidad cristiana local. Cinco años después, el mismo pontífice le nombró arzobispo titular de Adrianópolis. Tras la invasión soviética de Estonia el 17 de junio de 1940, casi todos los sacerdotes fueron arrestados y pudiendo haber regresado a su hogar, Profittlich se quedó en Estonia con sus fieles. El 27 de junio de 1941 fue detenido y deportado a Kirpov, (Rusia), donde fue sometido a múltiples torturas, a las que respondió declarando que su única misión había estado encaminada a la educación religiosa de los fieles. Condenado a muerte, falleció antes de la ejecución a causa de las torturas.
Beato Elia Comini
El siervo de Dios Elia Comini es otro de los sacerdotes que será declarado beato. Nacido en Calvenzano di Vergato (Italia) el 7 de mayo de 1910, el sacerdote salesiano fue asesinado por odio a la fe el 1 de octubre de 1944 en Pioppe di Salvaro, en la Italia ocupada por el ejército alemán.
Fue ordenado sacerdote el 16 de marzo de 1935, dedicándose desde entonces a la educación de los jóvenes en las escuelas salesianas de Chiari y Treviglio, de las que también llegó a ser director.
En 1944, el siervo de Dios acudió a Salvaro, epicentro del fuego cruzado entre los contendientes de la II Guerra Mundial, para acoger a varias familias desplazadas que buscaban refugio.
El 29 de septiembre del mismo año, el sacerdote se disponía a llevar consuelo a los moribundos cuando fue delatado y acusado falsamente de ser un espía de la resistencia, siendo encarcelado con otros sacerdotes en un establo de Pioppe di Salvaro.
Allí administró los sacramentos a quienes lo precisaban, mientras fracasaban los intentos de mediación para salvarle. Finalmente el 1 de octubre de 1944 fue asesinado junto con el padre Martino Capelli, entre decenas de personas.
Tras ser ametrallados, el cuerpo de Don Comini protegió a uno de los supervivientes, testigo decisivo de los hechos que contribuyó a dar a conocer el martirio del siervo de Dios, cuyo cuerpo se perdió en las aguas del río Rin.
Junto a ellos, también fueron declarados tres venerables.
En el caso de Áron Márton, el sacerdote y posteriormente obispo de Alba Julia se opuso a las leyes raciales aprobadas en Alemania y se hizo cargo de refugiados y exiliados. En la posguerra, se dedicó incansablemente a salvaguardar la fe ante los ataques del comunismo en Rumanía. Detenido en 1949, fue juzgado y condenado a duras prisiones y trabajos forzados. Murió de cáncer poco después de dejar la dirección de su diócesis el 2 de abril de 1980.
Otro de los venerables es Giuseppe Maria Leone, famoso predicador y confesor italiano que permaneció junto a las familias afectadas por la epidemia de cólera que se extendió entre la población en 1867. Leone se dedicó más tarde a la publicación y reimpresión de obras de carácter ascético y espiritual. Se distinguió como confesor, director espiritual y predicador de ejercicios espirituales a sacerdotes, seminaristas y monjas, contribuyendo significativamente a la renovación de la vida religiosa y al crecimiento espiritual también de los fieles laicos. De muy mala salud, su estado empeoró a principios de 1902 y falleció pocos meses después.
El tercero de los venerables es Pierre Goursat, laico francés consagrado que dedicaría su vida a las personas sin recursos, con dificultades físicas y mentales y marcados por las drogas y la delincuencia. También inició los grupos de oración Emmanuel con sede en Paray-Le-Monial.
Nacido en 1914 y converso con 19 años, Pierre Goursat se retira en 1985 del manejo de la Comunidad Emmanuel, pasando los últimos años de su vida en silencio y adoración. Muere el 25 de marzo de 1991.