El Papa Francisco se encuentra «consciente y respirando por sí mismo», informa la Santa Sede
El director de la oficina de prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni, ha informado este lunes sobre la evolución del Papa Francisco, que fue intervenido quirúrgicamente este domingo por la tarde y cuya noticia sorprendió a todos pues llegó a presidir el rezo del Ángelus unas horas antes en la Plaza de San Pedro.
De este modo, la Santa Sede ha informado que “Su Santidad el Papa Francisco se encuentra en buen estado general, consciente y respirando por sí mismo”.
Del mismo modo, el portavoz vaticano ha indicado en el comunicado que “la intervención quirúrgica por estenosis diverticular realizada en la tarde del 4 de julio consistió en una hemicolectomía izquierda y duró unas tres horas”.
“Se espera una hospitalización de unos 7 días, salvo complicaciones”, añade Matteo Bruni.
Intervención programada, pero discreta
Francisco fue ingresado el domingo en torno a las tres de la tarde en el Hospital Policlínico Agostino Gemelli de Roma para esta operación quirúrgica programada por una estenosis diverticular sintomática del colon.
La operación fue llevada a cabo por el doctor Sergio Alfieri, especialista en cirugía digestiva, con la asistencia del profesor Luigi Sofo, del doctor Antonio Tortorelli y de la doctora Roberta Menghi. También estuvo presente en el quirófano el doctor Roberto Bernabei, médico personal del Papa.
Una estenosis diverticular es un estrechamiento de un divertículo formado en el colon. En muchas ocasiones estos divertículos (hernias de la mucosa del intestino que aparecen a través de su capa muscular) son asintomáticos. En el caso del Papa sí ha habido los síntomas que han conducido a detectarlos: normalmente dolor en el bajo vientre y problemas en la evacuación. La finalidad de la intervención quirúrgica, además de aliviar los síntomas, es evitar la rotura del divertículo y una posible infección.
Los problemas del colon del Papa se detectaron en febrero. El geriatra Roberto Bernabei, nuevo médico personal del pontífice tras el fallecimiento en enero del doctor Fabrizio Soccorsi, fue quien decidió, de acuerdo con la agenda papal, esta intervención.