El gobierno y sus monaguillos mediáticos cargan contra Valencia… por cumplir la ley del aborto

Igualdad y Sanidad, así como «El País» y «Público», reaccionan contra la medida «coercitiva». El PSOE valenciano dice que es «terrorismo militante».

11 julio 2010 00:00

Clínica abortista

El anuncio de la Generalitat de Valencia de que, en cumplimiento de la nueva Ley del aborto, informarán a las mujeres que lo soliciten sobre el procedimiento de la intervención para «interrumpir el embarazo» y que mostrarán a través de ecografías en 3D el proceso de la gestación, además de ampliar el ejercicio de la objeción de conciencia a los empleados públicos que no son profesionales sanitarios, ha causado la irritación del Gobierno y de algunos medios de prensa afines al PSOE.

Medida «coercitiva»

La secretaria general de Políticas de Igualdad, Isabel Martínez, tachó la medida de «coercitiva» y aseguró que su departamento vigilará el procedimiento anunciado por la Generalitat.

Isabel Martínez advirtió a Valencia que «no se puede utilizar la ley para coaccionar o tratar de disuadir a las mujeres. Ni hacia un lado ni hacia el otro».

«Vulneraría claramente la ley»

En espera aún de mayores detalles sobre las medidas que adoptarán desde Valencia, el secretario general de Sanidad, José Martínez Olmos, advirtió que «si se da cuando la mujer pida información sobre un aborto, vulneraría claramente la ley». «En tal caso, impugnaríamos la medida», agregó.

«Si no lo hacen (cumplir con la ley), tendríamos que acudir a los tribunales», dice Martínez Olmos, que criticó actitudes como la murciana y la valenciana. "Parece que buscan resquicios para tratar de no aplicar la ley de manera correcta", declaró el secretario de Sanidad.

«El País» y «Público»

Los altavoces mediáticos del gobierno, los diarios «El País» y «Público», tampoco han recibido con agrado el anuncio de la consejera portavoz de la Generalitat Valenciana, Paula Sánchez de León.

Ofreciendo su particular punto de vista sobre el tema, «El País» informa que «El Gobierno valenciano, que preside el popular Francisco Camps, hará pasar a las mujeres que quieran abortar por un trance de "información visual" con el objetivo de disuadirlas».

«Pero además de la información escrita sobre las implicaciones médicas que marca la norma, las mujeres valencianas serán sometidas a un asesoramiento "ético" que empleará "cualquier formato gráfico", como vídeos, fotografías de abortos y hasta ecografías en tres dimensiones "sobre la formación de la vida"», informa.

Asimismo, al tiempo que reconoce que cada comunidad autónoma es libre de confeccionar una parte de la información que es ofrecida a las mujeres solicitantes del aborto, el diario socialista considera que en el caso valenciano se presiona a las gestantes. «La nueva ley marca que (esta información) debe "sencilla, objetiva y comprensible" y sobre todo, que debe ofrecerse "de un modo exento de presión para la mujer". Algo dudoso en el caso valenciano». El diario no explica porqué, a su juicio, mostrar información como ecografías 3D de fetos en gestación viola la ley.

Una respuesta similar ha tenido el diario «Público». En una noticia titulada «Valencia insiste en saltarse la Ley del Aborto. El Govern incluirá fotos de fetos en los sobres de reflexión» da voz al secretario general de los socialistas valencianos, Jorge Alarte, quien «criticó al Ejecutivo autonómico "por la falta de respeto a las mujeres y a sus derechos". Alarte advirtió que su partido no va a "consentir que se acose y persiga moralmente a las mujeres"».

Otra titulada «Camps presionará con imágenes a las abortistas», el diario recogió las declaraciones de la diputada autonómica del PSPV-PSOE Consuelo Catalá, que participó en la elaboración de la Ley del Aborto.

Catalá «no dio crédito hoy al anuncio del Consell al que acusó de hacer "terrorismo militante desde las instituciones"» y «culpó al gobierno valenciano de aprobar "medidas de acoso y de presión contra las mujeres y los profesionales sanitarios, algo que demuestra que son unos golpistas institucionales, inquisitoriales y con grandes dosis de crueldad"».