Rafael Bedros XXI, nuevo Patriarca de los católicos de rito armenio unidos a Roma: una gran diáspora
Los católicos de rito armenio han elegido a su nuevo Patriarca para todo el mundo, y es el obispo armenio-católico de Jerusalén (que también atendía a los armenio-católicos de Europa Oriental).
La Iglesia Católica Armenia -católicos, pero de rito armenio- cuenta con unos 20 obispos y unos 200.000 fieles, la mayoría en Norteamérica, en Argentina y en Francia. Solo son unos 500 los que viven entre Israel, Palestina y Jordania y su obispo (exarca) pasa ahora a ser el Patriarca por votación de los obispos armenio-católicos reunidos en Roma.
Los obispos del Sínodo armenio-católico reunidos en Roma
Se trata de Rafael Francisco Minassian, quien desde 2011 pastoreaba no sólo a los armenios de Tierra Santa sino también a los de Georgia, Rusia, Ucrania y Armenia (donde los católicos son pocos).
Nacido en el Líbano, se convierte en el 21º Patriarca de la Iglesia Católica Armenia, y como todos sus predecesores toma el nombre de Pedro (Bedros): es Rafael Bedros XXI Minassian, Catolicós-Patriarca de Cilicia de los Armenios.
Su padre fue un niño refugiado
Sus abuelos murieron en el genocidio armenio, al que no ha dejado de denunciar enérgicamente a lo largo de los años acompañándolo, sin embargo, con palabras de diálogo y reconciliación con los turcos. Su padre, que quedó huérfano, fue salvado en 1919 y acogido junto con cientos de niños en Castel Gandolfo por voluntad del Papa Benedicto XV.
Nació en Beirut el 24 de noviembre de 1946 y realizó sus estudios en el seminario patriarcal de Bzommar (1958-1967). Posteriormente estudió filosofía y teología en la Pontificia Universidad Gregoriana entre 1967 y 1973. También estudió psicopedagogía en la Pontificia Universidad Salesiana. Fue ordenado sacerdote el 24 de junio de 1973.
De 1973 a 1982 fue párroco de la catedral armenia de Beirut; de 1982 a 1984 secretario del patriarca Hovannes Bedros XVIII Kasparian y entre 1984 y 1989 se encargó de la fundación del complejo parroquial de la Santa Cruz de Zalka, en Beirut.
En 1989-1990 pasó un año en Nueva York como párroco de los armenio-católicos neoyorquinos. Después, hasta 2003, fue párroco de los católicos armenios en California, Arizona y Nevada. Conoce bien, pues, Estados Unidos.
Desde 2004 es director (y fundador) de Telepace Armenia y al año siguiente fue nombrado exarca patriarcal de Jerusalén y Ammán para los armenios. El 24 de junio de 2011 fue nombrado obispo ordinario de los fieles católicos armenios de Europa del Este, con la asignación de la sede titular arzobispal de Cesarea de Capadocia de los Armenios y el título de arzobispo ad personam. Fue también presidente de Caritas Armenia.
Una misa por el rito armenio con Rafael Minassian
Cada vez hay menos cristianos armenios en Tierra Santa: en 1967 había unos 4.000 armenios en Jerusalén, pero ahora apenas hay 1.500, de los que pocos son católicos.
La Iglesia armenia es, en cierto sentido, la más antigua de Tierra Santa. Armenia fue el primer país -el primer gobierno- que asumió el cristianismo como religión de Estado. Sucedió en el año 303 cuando el rey Tiridates III de Armenia se convirtió al cristianismo, estableció la fe cristiana como la oficial y designó a Gregorio I el Iluminador como Katolicós (máximo jerarca de la nación armenia).
En el siglo VI, la Iglesia armenia se separó de la Iglesia universal al no aceptar textos del Concilio de Calcedonia (del 451 d.C) al que no habían podido enviar delegados debido a una guerra. En el fondo del problema había malas traducciones de los textos. Hubo intentos de reconciliación con Roma en el siglo XII que no cuajaron. Los armenios de la Iglesia apostólica -separados de Roma pero con buenas relaciones y muchos avances ecuménicos- son hasta 9 millones en todo el mundo. Armenia como país tiene sólo 3 millones de habitantes.
Entrevista de 2017 a Rafael Minassian en la que explicaba el origen, peculiaridad y circunstancias actuales de la Iglesia Armenia Católica (en español, de HM TV)