«La Razón» habla con 3 jóvenes con fe, musulmana, judía, católica: los 3 se han sentido bichos raros
Los jóvenes católicos practicantes en España son un 8%, mientras que los jóvenes ateos convencidos son tres veces más, un 24%. En cuanto a los jóvenes de otra religión son también pocos, un 5%, según el estudio de la Fundación SM de 2017.
Por eso, no es extraño que cuando un periodista de La Razón va a hablar con una joven judía, un joven musulmán y una joven católica conversa, los tres aseguren haberse sentido como bichos raros en varias ocasiones. Pertenecen a la minoría de jóvenes con fe y se ven rodeados de multitudes de personas "anestesiadas", dicen, que ni siquiera se hacen preguntas.
Yasin es musulmán; Paula, católica y Agustina, judía.
Paula, graduada en Bellas Artes y Máster en Humanidades, es católica conversa: tiene 22 años pero hace solo 3 que vive la fe, bajo la mirada atónita de sus padres y amigos. Paula es quien dice que «el 90% de la gente de nuestra edad vive anestesiada, no le da importancia a los valores, todo es relativo».
Bichos raros, "lavar el cerebro"...
En más ocasiones de las deseadas, los tres se han sentido como «bichos raros» entre sus coetáneos. «Cuando me convertí, lo primero que hice fue decir a mis padres que quería ir a catequesis y a grupos religiosos y me contestaron que por qué. Pensaban que era algo sectario y eso que ellos son católicos, pero no practicantes. A mis amigas del colegio de toda la vida que son creyentes les pareció raro, pero me dijeron que probara. Los compañeros de Bellas Artes insistían en que me iban a lavar el cerebro», apunta Paula.
Yasin, ingeniero industrial, musulmán nacido en familia musulmana hace 28 años, asegura: «La religión está oculta, se guarda para la privacidad, no se muestra a la sociedad, ni en el trabajo ni en la universidad. Se ha convertido en un tema tabú. Dicho esto, no creo que hoy en día resulte complicado ser practicante porque los valores de cualquier religión están compartidos por la sociedad. Los principios europeos son los de la religión, lo que no está presente es el asunto de la adoración. Yo siempre he sido practicante y nadie me lo ha impedido». «En el islam hay una parte constante y una parte variable. La religión se adapta a cada lugar y al contexto donde cada uno vive. Pero tampoco se puede aceptar todo», reivindica Yasin.
Agustina, judía y trabajadora social, afirma: «Nuestra labor como jóvenes es romper con ese miedo o rechazo a los creyentes. Dar a conocer nuestras costumbres, nuestras creencias. A mí, por ejemplo, me dicen: ''Ah, que eres judía, pues no lo parece. ¿Llevas ese candelabro con muchos bracitos?'' Este tipo de clichés deben desaparecer». Agustina enfatiza el poder de la educación en hacer jóvenes críticos «y que sean capaces de cuestionarse, de plantar cara a lo establecido. No rechazarlo, pero sí analizarlo».
Hacerse preguntas y tener una hipótesis defendible
Paula, la joven católica, anima a la gente a hacerse preguntas. «Lo importante es tener una hipótesis de vida que se pueda defender. El ateísmo es también una. Lo que me preocupa es que la gente no se haga preguntas de manera seria. Si se las hacen y la opción es ser ateo, adelante».
Sólo un 8% de los jóvenes españoles son católicos de ir a misa cada domingo.
Hay, además, un 14% de jóvenes en España que se declaran "no muy practicantes". En realidad, cuando observamos con detalle, vemos que seis de cada diez de esos "no muy practicantes" admiten que no van a la iglesia prácticamente nunca. Uno de cada cinco "no muy practicantes" acude "una vez al mes" (quizá a catequesis esporádicas o acompañando un pariente) y otro de cada cinco acude en algunas fiestas y romerías del año (Navidad, peregrinaciones...). Muchos jóvenes cofrades encajarían aquí.
El tercer tipo de jóvenes son los que se declaran "católicos no practicantes", que no van nunca, nunca, nunca a la parroquia: son un 18% de la juventud española. El 77% de estos "católicos no practicantes" cree en Dios, pero solo un 40% cree que Jesucristo es Dios, sólo un 37% cree que hay "vida después de la muerte" y apenas un 30% cree que Jesús resucitó. Pero un 22% de ellos declaraba (en 2015) tener "bastante o mucha confianza" en la Iglesia Católica. (Le superan en confianza los jóvenes de otras religiones, que tienen un 24% de confianza en la Iglesia).
(Aquí el artículo de La Razón completo)