En Hondarribia, los soldados romanos caen desplomados en la iglesia cuando se lee la Resurrección
Un general, dos escuderos y 16 alabarderos. En total, 19 soldados romanos. Ellos fueron el centro de todas las miradas y los grandes protagonistas del Domingo de Resurrección en Hondarribia donde tuvo lugar, un año más, una de las tradiciones más singulares de la Semana Santa de Guipúzcoa: la caída de los romanos.
Pocos minutos antes de las diez de la mañana, los soldados salieron de los arkupes del Ayuntamiento en dirección a la parroquia de Nuestra Señora de la Asunción y del Manzano.
Con paso lento y marcado, recorrieron los escasos metros que separan ambos puntos ante la mirada de la gente concentrada a la entrada del templo.
Ya en el interior, atravesaron el pasillo central para colocarse delante del altar. Muy cerca de ellos, en las primeras filas y en los laterales, se situaron los más pequeños que, acompañados de sus familiares, no se quisieron perder ni un solo detalle de esta curiosa representación.
Cuando el párroco Victoriano Etxabe terminó la lectura del evangelio, entonó el «Gloria in excelsis Deo» (Gloria a Dios en el Cielo) y, en ese momento, al conocer la noticia de la resurrección, los soldados se desplomaron.
Tras unos segundos sin que ninguno de ellos se moviera, el capitán fue el primero en reaccionar y ponerse en pie, aunque todavía estaba algo aturdido tras lo que acababa de escuchar. Mientras el coro cantaba el ´Aintza Aleluya´, intentó despertar a sus compañeros pero sin éxito. Fue golpeándoles uno por uno, pero ninguno de ellos respondió y volvió a caer al suelo.
Poco después se levantó otro soldado, concretamente uno de los escuderos, que golpeó precisamente su escudo. Este sonido sí que hizo reaccionar el resto de romanos que, poco a poco, se fueron incorporando. Aún desconcertados por todo lo que había sucedido, abandonaron la parroquia con el repicar de las campanas de fondo.
Los soldados volvieron a formar en el exterior para recorrer las calles de la localidad. Mucha gente salió con ellos del templo, como la gran mayoría de los niños, mientras que las personas que se quedaron en el interior siguieron la ttopara. Finalizado el encuentro entre la Virgen y el Santísimo frente al Santo Sepulcro, se celebró la Misa Mayor.
La Semana Santa de Hondarribia concluye con la romería en Guadalupe. Durante este Lunes de Pascua habrá instalada una feria de alimentación en este punto.
Galería de fotos de los soldados romanos dormidos en Hondarribia
Pocos minutos antes de las diez de la mañana, los soldados salieron de los arkupes del Ayuntamiento en dirección a la parroquia de Nuestra Señora de la Asunción y del Manzano.
Con paso lento y marcado, recorrieron los escasos metros que separan ambos puntos ante la mirada de la gente concentrada a la entrada del templo.
Ya en el interior, atravesaron el pasillo central para colocarse delante del altar. Muy cerca de ellos, en las primeras filas y en los laterales, se situaron los más pequeños que, acompañados de sus familiares, no se quisieron perder ni un solo detalle de esta curiosa representación.
Cuando el párroco Victoriano Etxabe terminó la lectura del evangelio, entonó el «Gloria in excelsis Deo» (Gloria a Dios en el Cielo) y, en ese momento, al conocer la noticia de la resurrección, los soldados se desplomaron.
Tras unos segundos sin que ninguno de ellos se moviera, el capitán fue el primero en reaccionar y ponerse en pie, aunque todavía estaba algo aturdido tras lo que acababa de escuchar. Mientras el coro cantaba el ´Aintza Aleluya´, intentó despertar a sus compañeros pero sin éxito. Fue golpeándoles uno por uno, pero ninguno de ellos respondió y volvió a caer al suelo.
Poco después se levantó otro soldado, concretamente uno de los escuderos, que golpeó precisamente su escudo. Este sonido sí que hizo reaccionar el resto de romanos que, poco a poco, se fueron incorporando. Aún desconcertados por todo lo que había sucedido, abandonaron la parroquia con el repicar de las campanas de fondo.
Los soldados volvieron a formar en el exterior para recorrer las calles de la localidad. Mucha gente salió con ellos del templo, como la gran mayoría de los niños, mientras que las personas que se quedaron en el interior siguieron la ttopara. Finalizado el encuentro entre la Virgen y el Santísimo frente al Santo Sepulcro, se celebró la Misa Mayor.
La Semana Santa de Hondarribia concluye con la romería en Guadalupe. Durante este Lunes de Pascua habrá instalada una feria de alimentación en este punto.
Galería de fotos de los soldados romanos dormidos en Hondarribia
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