El 25 de marzo
Los obispos andaluces entran en escena en las elecciones parlamentarias
Ofrecemos "orientaciones" generales a los católicos y "a cuantos quieran escucharnos".
Los obispos de las diócesis de Andalucía han emitido este miércoles una nota titulada ´Ante las Elecciones al Parlamento Andaluz´ en la que piden, como "orientaciones" generales a los católicos y "a cuantos quieran escucharnos", que se "rechace el aborto y la eutanasia" y se defienda el matrimonio como "unión estable de un varón y una mujer" a la hora de ejercer el voto en los comicios autonómicos del próximo 25 de marzo.
En esta nota, los obispos andaluces llaman la atención sobre la importancia de "participar responsablemente" en estas elecciones y de "cumplir con el deber moral que todo ciudadano tiene en la búsqueda y afianzamiento del bien común de la sociedad en todo momento". Con esta intención, según justifican en su escrito, ofrecen unas "orientaciones sin otra pretensión que ofrecer elementos morales de juicio a la hora de decidir el voto, del cual depende la consecución del bien común de la sociedad, fundado en los derechos fundamentales de las personas y grupos sociales".
Entre esas recomendaciones se incluyen las de "discernir en los programas de los partidos la garantía del derecho a la vida humana desde su concepción hasta su muerte natural", es decir, rechazar "el aborto, la eutanasia y el abandono de los ancianos, sin olvidar el apoyo a las mujeres que viven la espera de un hijo en situaciones difíciles"; o la de proteger "legal y económicamente el matrimonio como institución social, fundado en la unión estable de un varón y una mujer, y de la familia como ámbito natural de la crianza y educación de los hijos". "Esto supone la promoción del trabajo y de la vivienda, así como la puesta en práctica de un programa de inserción laboral de los jóvenes en la sociedad, de especial urgencia en la situación social actual de crisis económica", explican los obispos.
Mención especial hacen también de la educación, para la que defienden "la libertad de enseñanza y el derecho a la educación religiosa según las propias convicciones morales y religiosas de los padres, prevista en la Constitución". Según los obispos, "hoy es particularmente necesario promover una educación que valore el aprendizaje y la formación humana mediante el esfuerzo y la disciplina, que promueva la búsqueda y el conocimiento de la verdad, así como los valores morales en los que se funda una vida honrada y la convivencia pacífica, y las virtudes que la hacen posible".
Contra la "mentalidad de la subvención"
En otro orden de cosas, los responsables de las diócesis de Andalucía reflexionan sobre "el momento histórico" actual y que, a su juicio, obliga "a todos a construir una vida social más justa y pacífica", basada en la necesidad de "promover la estima del trabajo y del sacrificio como medio justo decrecimiento personal y colectivo para el logro del bienestar", frente a "la mentalidad tan extendida del derecho a la dádiva y de la subvención".
Asimismo, defienden que, "frente a la corrupción y la mentira, urge promover la honradez, el respeto a la ley y la fidelidad a la palabra dada" y "frente al consumismo desmedido, es preciso potenciar el sentido de la realidad y de la austeridad". En esta misma línea, añaden que "frente a la fragmentación y confrontación social, se ha de promover el valor humano y social de la reconciliación, el diálogo y la amistad entre las personas, aun cuando no compartan la misma concepción del ordenamiento social".
Los obispos también consideran que, debido a la crisis económica y financiera, todos los ciudadanos --"electores y elegidos"-- deben tener "una gran altura de miras más allá de los intereses de partido" y no "escatimar esfuerzos que abran un camino de progreso y esperanza para las nuevas generaciones". Este nuevo camino debe basarse en "la defensa y la ayuda a los sectores más débiles de nuestra sociedad", así como en la promoción de "condiciones que hagan posible la productividad, la creación de nuevos puestos de trabajo sin soslayar el sentido de la justicia y de la solidaridad en la contratación laboral". "Del mismo modo, es urgente la promoción de una opinión pública y una legislación respetuosa con la dignidad de los emigrantes", agregan.
Por último, los obispos andaluces recuerdan que, a través del voto emitido "con inteligencia, libertad y responsabilidad" se puede edificar "una sociedad más justa y pacífica" y que, por tanto, se debe elegir a los candidatos que "puedan afrontar y resolver mejor los problemas actuales de nuestra sociedad". "Competencia y responsabilidad moral son factores que generan la necesaria confianza de los ciudadanos en quienes han de desempeñar las funciones de gobierno", concluyen.
En esta nota, los obispos andaluces llaman la atención sobre la importancia de "participar responsablemente" en estas elecciones y de "cumplir con el deber moral que todo ciudadano tiene en la búsqueda y afianzamiento del bien común de la sociedad en todo momento". Con esta intención, según justifican en su escrito, ofrecen unas "orientaciones sin otra pretensión que ofrecer elementos morales de juicio a la hora de decidir el voto, del cual depende la consecución del bien común de la sociedad, fundado en los derechos fundamentales de las personas y grupos sociales".
Entre esas recomendaciones se incluyen las de "discernir en los programas de los partidos la garantía del derecho a la vida humana desde su concepción hasta su muerte natural", es decir, rechazar "el aborto, la eutanasia y el abandono de los ancianos, sin olvidar el apoyo a las mujeres que viven la espera de un hijo en situaciones difíciles"; o la de proteger "legal y económicamente el matrimonio como institución social, fundado en la unión estable de un varón y una mujer, y de la familia como ámbito natural de la crianza y educación de los hijos". "Esto supone la promoción del trabajo y de la vivienda, así como la puesta en práctica de un programa de inserción laboral de los jóvenes en la sociedad, de especial urgencia en la situación social actual de crisis económica", explican los obispos.
Mención especial hacen también de la educación, para la que defienden "la libertad de enseñanza y el derecho a la educación religiosa según las propias convicciones morales y religiosas de los padres, prevista en la Constitución". Según los obispos, "hoy es particularmente necesario promover una educación que valore el aprendizaje y la formación humana mediante el esfuerzo y la disciplina, que promueva la búsqueda y el conocimiento de la verdad, así como los valores morales en los que se funda una vida honrada y la convivencia pacífica, y las virtudes que la hacen posible".
Contra la "mentalidad de la subvención"
En otro orden de cosas, los responsables de las diócesis de Andalucía reflexionan sobre "el momento histórico" actual y que, a su juicio, obliga "a todos a construir una vida social más justa y pacífica", basada en la necesidad de "promover la estima del trabajo y del sacrificio como medio justo decrecimiento personal y colectivo para el logro del bienestar", frente a "la mentalidad tan extendida del derecho a la dádiva y de la subvención".
Asimismo, defienden que, "frente a la corrupción y la mentira, urge promover la honradez, el respeto a la ley y la fidelidad a la palabra dada" y "frente al consumismo desmedido, es preciso potenciar el sentido de la realidad y de la austeridad". En esta misma línea, añaden que "frente a la fragmentación y confrontación social, se ha de promover el valor humano y social de la reconciliación, el diálogo y la amistad entre las personas, aun cuando no compartan la misma concepción del ordenamiento social".
Los obispos también consideran que, debido a la crisis económica y financiera, todos los ciudadanos --"electores y elegidos"-- deben tener "una gran altura de miras más allá de los intereses de partido" y no "escatimar esfuerzos que abran un camino de progreso y esperanza para las nuevas generaciones". Este nuevo camino debe basarse en "la defensa y la ayuda a los sectores más débiles de nuestra sociedad", así como en la promoción de "condiciones que hagan posible la productividad, la creación de nuevos puestos de trabajo sin soslayar el sentido de la justicia y de la solidaridad en la contratación laboral". "Del mismo modo, es urgente la promoción de una opinión pública y una legislación respetuosa con la dignidad de los emigrantes", agregan.
Por último, los obispos andaluces recuerdan que, a través del voto emitido "con inteligencia, libertad y responsabilidad" se puede edificar "una sociedad más justa y pacífica" y que, por tanto, se debe elegir a los candidatos que "puedan afrontar y resolver mejor los problemas actuales de nuestra sociedad". "Competencia y responsabilidad moral son factores que generan la necesaria confianza de los ciudadanos en quienes han de desempeñar las funciones de gobierno", concluyen.
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