«Los primeros cristianos convirtieron un imperio»: la «clave de su éxito»… y su mensaje a los de hoy

¿Quiénes eran, con nombres y apellidos, los primeros cristianos? ¿Cómo defendieron la fe ante la persecución y las primeras herejías? Si pudiesen dar un mensaje a los del siglo XXI, ¿cuál sería? El de la Iglesia primitiva es un tema del que se habla cada vez más pero con visiones frecuentemente alejadas de la realidad. Por ello, acercar la Iglesia de los primeros siglos al lector y dar respuesta a estos interrogantes en base al estudio de las fuentes es el objetivo que ha llevado al economista Gabriel Larrauri a publicar El ejemplo de los primeros cristianos. ¿Qué nos dicen a los cristianos de hoy? (Eunsa).

El de los primeros cristianos podría considerarse un tema alejado en exceso del presente o carente de interés para la Iglesia de hoy. Larrauri, sin embargo, lo considera imprescindible para saber cómo enfrentar antiguas y nuevas formas de persecución de nuestros días o incluso para tomar la iniciativa y, como ellos hicieron, "convertir un imperio" hostil a la fe.

Promotor de la web primeroscristianos con dos décadas de recorrido e investigación de esta materia, Larrauri ha dedicado buena parte de su tiempo a transmitir el ejemplo y la historia de los primeros protagonistas de la Iglesia.

El destino de la Iglesia, en juego 

Por eso, la suya es una opinión a tener en cuenta cuando afirma que son "el mejor referente" para los cristianos de hoy.

"Vivían en un mundo pagano, pero no se retiraron de él. Los primeros cristianos vivían en circunstancias difíciles, como nosotros. Su vitalidad no era fruto de una actitud ingenua, sino de la fuerza de su fe y el ejemplo de su caridad que a tantos atraía", explica.

Lo cierto es que ni la persecución por los tiranos, ni la "cólera del pueblo" o los asesinatos cotidianos pudieron contener el empuje de los primeros cristianos. Su fuerza, explica, radicaba en que consideraban su vida como "una apuesta en la que se jugaba el destino de la Iglesia y de los hombres".

Naturalidad, la clave del éxito

Por ello, lejos de apostatar, los primeros cristianos "fueron fieles". Tanto que "convirtieron un imperio", conformando "con su estilo de vida la sociedad de entonces y de los siglos posteriores".

Pero ¿qué hacían los primeros cristianos para lograrlo? Larrauri explica que no se dedicaban -principalmente- a predicar, a elaborar estrategias de actuación o control y dominio cultural. Simplemente "vivían con total naturalidad la fe en cada minuto de su día" y eso es precisamente lo que atrajo "como un imán" a sus coetáneos. "Ese es el secreto de su éxito", afirma.

Puedes conseguir aquí "El ejemplo de los primeros cristianos" (Eunsa), de Gabriel Larrauri Aguirre. 

¿Puede ayudar el ejemplo de los primeros cristianos a la Iglesia de hoy? El economista y estudioso considera que conocer el modo de enfrentar la persecución por parte de los primeros cristianos puede ayudar a enfrentarla hoy.

"La persecución no es algo que sea nuevo en la historia de la Iglesia. Seguirá sucediendo. Conocer el ejemplo de vida de los que han sabido superar esas situaciones tan adversas, llegando incluso a entregar su vida por mantenerse firmes a su fe, nos llena de fortaleza", explica.

La coherencia cristiana: es "arriesgada", pero no hay otra opción

Una persecución que en algunos lugares del mundo se mantiene cruenta como en los primeros siglos. En otros, esta ha mutado, pero considerar que es "arriesgado vivir la fe de forma coherente" no está alejado de la realidad, "no solo en países donde la persecución es abierta y desoladora sino en el ambiente de países de honda raíz cristiana".

¿Cómo enfrentar una persecución ante la que los cristianos, "si son coherentes, se la juegan"? El autor apunta, precisamente, a la coherencia como la única forma de "ganar la batalla".

Gabriel Larrauri, licenciado en Ciencias Económicas, lleva décadas estudiando y divulgando el ejemplo y la vida de los primeros cristianos, especialmente desde el portal Primeros Cristianos. 

"De ahí precisamente nace la enorme actualidad de los primeros cristianos, que vivieron una situación parecida y afrontaron con toda naturalidad sus riesgos. Hoy, como siempre, un cristiano se convierte en un testigo creíble cuando vive su fe con alegría y, al mismo tiempo, comparte con los demás las dificultades que encuentra en su camino", explica.

Conocer la vida, los riesgos y amenazas de los primeros cristianos y su forma de afrontarlos, "hacer presente el espíritu que vivieron" o que, con sus textos, hablen directamente al lector del siglo XXI es el objetivo principal de este nuevo libro.

Se trata,  dice, "de poner al alcance de los lectores algunos de los tesoros que se encuentran en sus escritos y que no son fácilmente conocidos por quienes no son especialistas". Y los ejemplos de los que dispone no son pocos. Los Padres Apostólicos, San Clemente de Roma, San Ignacio de Antioquía, San Policarpo de Esmirna, San Ireneo de Lyon, Orígenes, Clemente de Alejandría, Tertuliano, San Cipriano de Cartago o San Agustín son solo algunos de ellos.