Se rezará hasta que se elija al Papa
Una oración cada tarde pide en San Pedro «un nuevo Pentecostés de fervor y entusiasmo»
Desde el día 1 de marzo, cuando se inició la Sede Vacante, cada día antes de la misa de las cinco de la tarde se reza la siguiente oración en la Basílica de San Pedro, y se seguirá haciendo hasta la elección del nuevo Sumo Pontífice. La ha compuesto en italiano el cardenal Angelo Comastri, que es el vicario general para la Ciudad del Vaticano.
Va dirigida directamente a Jesucristo, con un párrafo que pide la intercesión directa de la Virgen María, invocando el poder del Espíritu Santo, como "un nuevo Pentecostés de fervor, de entusiasmo y de gozo obediente al Evangelio de Jesús".
La oración dice:
Va dirigida directamente a Jesucristo, con un párrafo que pide la intercesión directa de la Virgen María, invocando el poder del Espíritu Santo, como "un nuevo Pentecostés de fervor, de entusiasmo y de gozo obediente al Evangelio de Jesús".
La oración dice:
Señor Jesús, antes de dejar la escena de este mundo Tú dijiste a tus apóstoles: “Yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo”.
Nosotros sentimos tu presencia tranquilizadora y estamos seguros de que Tú permaneces siempre al timón de la barca de la Iglesia y la guía con mano firme en medio de las tempestades de la historia.
En este momento de anhelante espera, envía tu Santo Espíritu, para que ilumine las mentes de los Cardenales en la elección del sucesor de Pedro: que elijan a aquél en quien Tú has pensado y has designado para guiar hoy a tu rebaño.
Virgen Santa, tu oraste con los apóstoles en el Cenáculo y aguardaste con ellos la efusión del Espíritu Santo. Ruega con nosotros y por nosotros y obtennos el don de un nuevo Pentecostés de fervor, de entusiasmo y de gozo obediente al Evangelio de Jesús. Amén.
Nosotros sentimos tu presencia tranquilizadora y estamos seguros de que Tú permaneces siempre al timón de la barca de la Iglesia y la guía con mano firme en medio de las tempestades de la historia.
En este momento de anhelante espera, envía tu Santo Espíritu, para que ilumine las mentes de los Cardenales en la elección del sucesor de Pedro: que elijan a aquél en quien Tú has pensado y has designado para guiar hoy a tu rebaño.
Virgen Santa, tu oraste con los apóstoles en el Cenáculo y aguardaste con ellos la efusión del Espíritu Santo. Ruega con nosotros y por nosotros y obtennos el don de un nuevo Pentecostés de fervor, de entusiasmo y de gozo obediente al Evangelio de Jesús. Amén.
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