Así defiende Ciudadanos los vientres de alquiler: «Es feminista lo que implica ausencia de padres»

Ciudadanos se ha erigido como el gran defensor y promotor de la legalización de los vientres de alquiler en España. El partido liderado por Albert Rivera considera que la utilización de úteros de otras mujeres y la compra de estos bebés es progresista y feminista. Así lo creen firmemente los dirigentes de este partido. “¿Hay algo más feminista que una mujer ayudando a ser madre a otra mujer, altruistamente y con garantías?”, preguntaba el propio Rivera.

Ante las críticas que ha recibido por estas palabras, una de las caras más visibles del partido y candidata a la alcaldía de Madrid, Begoña Villacís, ha salido en su rescate con argumentos que muestran la deriva ideológica de la formación con respecto a los vientres de alquiler.

"Ausencia de padres"

“Es feminista todo lo que implica la ausencia de padres. Yo reivindico mi autonomía. El Estado no puede ser mi padre y decirme qué puedo hacer y qué no con mi cuerpo. Puede poner cautelas, pero no decirme qué es lo que puedo hacer”, espeta Villacís a El País.

Además, la concejal en el Ayuntamiento de Madrid argumenta que “es tan extrema una cosa como la otra: los que te dicen que no puedes abortar, como los que te dicen que no puedes gestar”.

Vientres de alquiler sí, pero su hija...

Begoña Villacís afirma que sería capaz de convertirse en un vientre de alquiler. “Si mi hija me dice que quiere que geste para ella, yo lo haría encantada de la vida”, afirma. Pero, ¿si fuera su hija la que se ofreciera? Aquí la concejal afirma que “la respetaría, claro que sí, a no ser que viera que hay una situación de abuso. Eso sí que tiene que controlarlo bien el Estado. El nuestro es un modelo altruista”.

Sobre los riesgos que entraña ser vientre de alquiler, la política de Ciudadanos afirma que “en la vida hay riesgos en todo. Hay muchos más riesgos siendo un conductor de taxi. Y también ocurre con el aborto, también entraña riesgos psicológicos, o cualquier actividad laboral puede generar enfermedades profesionales”.

Como de una transacción se tratara afirma que su partido defiende el “contrato de gestación por subrogación”  y aunque aseguran que sólo será altruista reconoce que “en todo puede haber pagos en negro”. 

La realidad que esconden los vientres de alquiler

Sin embargo, la realidad en los países en los que es legal es muy diferente en como lo cuenta Ciudadanos. ReL entrevistó a Gary Powell, concejal en el Reino Unido, activista homosexual, pero contrario al vientre de alquiler porque daña a mujeres y niños.

 Denunciaba que la llamada gestación altruista "no es altruista en realidad... La ley inglesa, por ejemplo, permite pagar una "compensación"; se pagan hasta 15.000 libras por 9 meses, y luego hay más conceptos. Para una mujer pobre eso es mucho, es un sueldo. Hay muchos trucos. Y es un tema internacional: es una industria que se enriquece pagando a mujeres pobres del Tercer Mundo, que en la práctica no podrán defenderse frente a una gran empresa. [...] En el vientre de alquiler los controles nunca serán suficientemente buenos. Lo mejor es que no se permita ningún tipo de vientre de alquiler. En Inglaterra, hace años que tenemos vientre "altruista" y no hay control de nada", denunciaba.

ReL también entrevistó a Julie Bindel, activista feminista que ha estado en la India conociendo esta industria. Insiste en que la "gestación altruista" no existe. "Una vez legalizado, ¿cómo puedes impedir que alguien pague a alguien, argumentando cualquier compensación o excusa? Siempre será comercial, y no hay forma de que una regulación impida que lo sea. Es una industria deshumanizante que comercia con cuerpos humanos. No puede haber buenas regulaciones ni en países ricos ni pobres, porque el tamaño de la industria hace que tenga una dimensión global".

Tampoco acepta que se hable de controles: "Los controles no pueden evitarlo. Es un tema global y siempre habrá mujeres pobres en la India con maridos que las presionan, o analfabetas, que no saben lo que firman. Hemos traído a España el caso de Kelly Martínez: la contrataron para gestar una parejita, niño y niña, pero cuando vieron que gestaba dos niños gemelos la dejaron tirada. Kelly es blanca, occidental, norteamericana, alfabetizada y mira cómo el negocio la usó. Imagínate con mujeres pobres, de la India. Ningún control protegerá frente a un negocio que mueve tanto dinero. Yo no soy relativista cultural: esto daña a las mujeres occidentales y también a las de otros países. La prohibición debe ser total".

Pero además existen otros muchos problemas relacionados con los vientres de alquiler “altruista” en países ricos. Este documental lo muestra con gran claridad: