El ejemplo de monseñor Óscar Braga, el apóstol de las vocaciones en África
Al principio del mes de agosto, don Óscar Lino Lópes Fernandes Braga, obispo emérito de Benguela (Angola) ha celebrado 50 años de vida sacerdotal y 40 años de episcopado. Don Óscar es una de las mayores insignes figuras de Angola. Resaltan en su pastoreo como obispo, el celo y el amor por las vocaciones y la preocupación por la buena formación sacerdotal.
Según el Anuario católico del 2008 don Óscar ha ordenado a más de 150 sacerdotes, hasta la fecha de hoy se calcula un aproximado de 200 sacerdotes entre diocesanos y religiosos. Ha ordenado también a tres obispos: don Mário Lukunde, de la diócesis de Cuando Cubango, don José Nambi, de la diócesis de Bié y don Emílio Sumbelelo, de la diócesis de Uíge.
Don Óscar Braga nació el 30 se septiembre de 1931 en Malanje, ciudad situada al norte del país de Angola. De joven agricultor experimenta el "Ven y sígueme" de Cristo. De tal experiencia resulta un ejemplar sacerdote. Su ejemplaridad y dedicación a su ministerio lo llevaron inmediatamente al episcopado.
Fue ordenado sacerdote el 27 de julio de 1964 y consagrado obispo en 1974. En 1975 el joven sacerdote Óscar es nombrado obispo de la diócesis de Benguela (convirtiéndose en el segundo obispo de Benguela) permaneciendo 33 años pastoreando la diócesis.
Don Óscar ha dado seria continuidad al trabajo vocacional ya iniciado por don Armando Amaral, (hombre identificado como austero, pertinaz y exigente), primer obispo de Benguela.
Don Amaral llegó con gran deseo en favor de las vocaciones y en la formación del clero en la diócesis que le fue asignada. Rápidamente organizó comisiones para el trabajo de la pastoral vocacional en la diócesis, logrando iniciar el camino de un clero auténtico y nacional.
Su sucesor, don Óscar (hombre caracterizado como vivo, creativo, dinámico, y organizador), preocupado en la formación de los futuros sacerdotes de su diócesis, creó seminarios. A la llegada de don Óscar a Benguela, los seminaristas se formaban en la diócesis de Huambo. Por tal motivo, funda el Seminario menor Buen Pastor.
Benguela ha sido y sigue siendo para el resto del país una diócesis modelo en lo que respecta a vocaciones. Don Óscar descubrió que "la llave de la cosecha de la Iglesia particular se encuentra en la dedicación a las vocaciones sacerdotales". Esta dedicación lo llevó a invertir en los seminarios y a dedicar tiempo al acompañamiento de sus seminaristas.
Benguela muy pronto pasó a ser una de las diócesis con mayor número de sacerdotes en Angola y una de las diócesis con mayor clero del continente africano. De este modo Benguela es una referencia vocacional para las otras diócesis de Angola.
La diócesis de Benguela pasó rápidamente de ser una diócesis con sacerdotes extranjeros a ser una diócesis con sacerdotes angoleños, pasando de diócesis "misionada" a diócesis "misionera". En la actualidad Benguela comparte su clero con algunas diócesis en Estados Unidos, España, Brasil y Portugal, entre otros.
No hay duda de que don Óscar ha dejado una marca indeleble con su trabajo pastoral en esta diócesis. Entre sus fundaciones destacan el movimiento eclesial Promoción de la Mujer Angola (PROMAICA), el Seminario Buen Pastor, etc.
Don Óscar es un obispo emérito muy querido por los ciudadanos de Benguela, admirado y apreciado por la mayoría de los angoleños. En la celebración de sus 50 años de sacerdotes participaron 24 obispos y más de 250 sacerdotes, centenares de religiosas y religiosos, y miles de fieles.
Además las máximas autoridades eclesiales, como don Alexandre de Nascimento (Cardenal de Angola), don Novatus Rugambua (Nuncio Apostólico en Angola) y el patriarca de Lisboa don Manuel Clemente, estuvieron presentes altas autoridades civiles y políticas, como el gobernador de Benguela, y diversos diputados y miembros del gobierno central. La presencia de estos grandes personajes no es nada más que una muestra de agradecimiento y cariño por todo el bien que ha realizado como obispo de Benguela.
Artículo originalmente publicado por Vocación y Actualidad
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