¿Ejercicios espirituales de todo un mes? Este agosto, en Pozuelo (Madrid): consulta cómo apuntarte

Uno de los maestros espirituales de la Iglesia Católica es sin duda San Ignacio de Loyola. Él, fruto de su experiencia personal en Loyola y Manresa, aprendió a discernir espíritus y legó a la Iglesia una joya espiritual, sus ejercicios espirituales.

En pleno siglo XXI, donde predomina el sentimentalismo, hay quien considera que los ejercicios espirituales son ya un vestigio del pasado y que no tiene cabida en la pastoral del siglo XXI. Frente a ese pensamiento, el Papa Francisco y muchos obispos siguen animando a los católicos a realizar los ejercicios espirituales de San Ignacio como un modo único y privilegiado de ordenar y orientar su vida hacia Dios.

Para conocer mejor esta realidad nos hemos acercado a conversar con Enrique Martín Baena, superior general de los Cooperadores Parroquiales de Cristo Rey, una orden fundada por el padre Vallet en los comienzos del siglo XX, que nace para promover en el ámbito parroquial los ejercicios espirituales. Este agosto ofrecerán una tanda de ejercicios de todo un mes. Puedes apuntarte a los ejercicios espirituales en este enlace.

-¿Cómo explicaríamos qué son los ejercicios espirituales?

-Los ejercicios espirituales nacen de la experiencia personal de San Ignacio de Loyola, en un momento de búsqueda de la voluntad de Dios.

»Esas experiencias, que fueron beneficiosas para él, las puso por escrito para poder así ayudar a otros. Eso es lo que hace que el libro de los ejercicios tenga un estilo conciso, dirigido sobre todo a quien los da. Tienen mucho de método y de pedagogía. Por eso, los ejercicios se reciben y es necesario que alguien que dirija acompañe a los ejercitantes.

»Desde hace cinco siglos han sido un modo de ayudar al encuentro con Dios en la propia vida, en el camino único e irrepetible de cada persona. Por eso los ejercicios acaban siendo una experiencia que marca un antes y un después en quien los hace.

Martín Baena es el superior general de los Cooperadores Parroquiales de Cristo Rey.

-¿Qué persigue San Ignacio con los ejercicios?

-El fin mismo de los Ejercicios es el discernimiento espiritual, ordenado a la búsqueda de la voluntad de Dios y a dejarse guiar por Él en todo momento.

»La genialidad de los Ejercicios reside en que Ignacio logró convertir en método la gracia que él recibió: cómo vivir el seguimiento de Jesús desde una manera concreta. Esa es la originalidad de los Ejercicios, que un carisma se vuelva método, que el Evangelio se vuelva espiritualidad viva en cada uno.

-¿Podemos decir, por tanto, que los ejercicios son un momento de encuentro con Dios?

-Sin duda, un momento de especial intensidad en el encuentro con Dios. Es el encuentro de un hombre que quiere rendir su voluntad a Dios y de un Dios que sólo busca encontrarse con el hombre para enseñarle el camino de la felicidad y la plenitud.

Puedes apuntarte a los ejercicios espirituales en este enlace.

-¿Cómo es la dinámica de los ejercicios espirituales?

-En primer lugar tenemos que enfatizar que los ejercicios espirituales son ejercicios hechos en silencio y soledad. Se trata de ejercicios de oración.

»Explicación de la palabra de Dios, oración personal y conversación espiritual diarias, son los tres ejes principales de esta experiencia que se vive en un clima de silencio y reflexión.

»El objetivo de los ejercicios espirituales es descubrir y escoger el plan de Dios para nuestra vida y entrenarnos para vencer los obstáculos que habrá en nuestro camino.

»Desde un punto de vista espiritual los ejercicios se estructuran en cuatro semanas:

1- Principio y Fundamento: el pecado y la misericordia.

2- Rey Eternal: las dos banderas, la llamada del Reino.

3- Pasión y muerte de Jesucristo.

4- Resurrección de Jesús: contemplación para alcanzar Amor.

-¿Cualquiera puede hacer ejercicios espirituales?

-Los ejercicios espirituales están pensados para personas que ya tienen una cierta base en la fe cristiana y que quieren profundizar y afianzarse en su camino de unión con Dios.

»Pero eso, en ningún caso, impide que cualquier persona que busque realmente un encuentro personal con Cristo pueda realizarlos.

Casa de Cristo Rey, situada en Pozuelo de Alarcón (Madrid, España).

-¿Cuál es la unión entre los Cooperadores Parroquiales de Cristo Rey y los ejercicios espirituales?

-La vocación del P. Francisco de P. Vallet, nuestro fundador, va unida de manera estrecha a los Ejercicios Espirituales. En los primeros ejercicios que él practica en Manresa, se produce su admirable conversión, y se siente llamado a consagrar su existencia a la difusión de los mismos. Como novicio en la Compañía de Jesús, su alma se estructuró según la espiritualidad del libro ignaciano.

»Los cooperadores Parroquiales de Cristo Rey CPCR creemos en la necesidad de una renovación de la persona y la sociedad, recristianizando a ésta, por medio de los ejercicios espirituales, dirigidos a todos los hombres necesitados de una experiencia seria y comprometida con su propia libertad ante Dios.

»Nuestro anhelo profundo y alma de nuestro apostolado es evangelizar por medio de los Ejercicios espirituales a todos los sectores de una sociedad cada vez más alejada de Dios y sometida a un secularismo fuera y dentro de nuestra propia Iglesia ayudando a vencer el repliegue de nosotros mismos con la mentalidad del mundo, sin ser fieles a la misión de la Iglesia, perdiendo el ser levadura en el mundo.

-¿Qué ofrecen los Cooperadores Parroquiales en materia de ejercicios espirituales?

-Este método de oración, discernimiento y encuentro con Dios es también uno de los instrumentos principales que usamos en nuestra labor evangelizadora.

»Desde la Casa de Cristo Rey, situada en Pozuelo de Alarcón, tratamos de ofrecer un servicio espiritual, basado en los ejercicios espirituales, los más amplio posible. Ofrecemos diferentes modalidades ejercicios de fin de semana, de 5 días, de semana e incluso ejercicios espirituales personalizados (en las fechas y horarios que convenga a la persona) o en la vida ordinaria.

»En los ejercicios en grupo, a pesar de tener unos horarios comunes, intentamos que la experiencia sea lo más personalizada posible a través de las conversaciones espirituales diarias con los que conducen los ejercicios.

»Normalmente este tipo de experiencia se hace en "retiro", es decir, en nuestra casa de acogida e ininterrumpidamente desde el principio hasta el final. En nuestra página web se pueden encontrar la fechas en que se realizan las diferentes tandas programadas durante el año.

-¿Es posible hacer ejercicios de mes?

-También, desde hace tres años nos animamos a dar el paso de organizar una tanda de mes durante el mes de agosto y la verdad es que la experiencia está siendo muy positiva.

»Estamos muy comprometidos en la tarea de dar a conocer la obra de los ejercicios espirituales de San Ignacio y, por eso decidimos unirnos a otras iniciativas de tandas de mes como las de la Compañía de Jesús o la Hermandad de Hijos de Nuestra Señora del Sagrado Corazón y el P. Manuel Vargas, que se realiza en julio, para ampliar la posibilidad de vivir esta experiencia espiritual y encuentro con Cristo únicos.

»Este año, de nuevo, durante el mes de agosto, concretamente del 31 de julio al 1 de septiembre, será posible vivir los ejercicios espirituales tal y como San Ignacio los pensó y escribió.

-¿Los ejercicios de mes son para cualquier persona?

-San Ignacio habla de dar los ejercicios (y él cuando hablaba de ejercicios se refería o bien a ejercicios leves conforme a la anotación 18 del libro de los Ejercicios, o bien los ejercicios de mes) solo a quien tiene "subiecto" es decir quien está en condiciones de sacar provecho y pasar adelante (se refiere a la primera etapa de primera semana ). Por tanto, los ejercicios espirituales no son para cualquier persona y tampoco para cualquier etapa de la vida espiritual.

-¿Qué aporta el carisma de los Cooperadores a los ejercicios espirituales?

-Lo que aporta es que nosotros no nos conformamos con mostrar un método más de oración sino que intentamos mostrar un estilo de vida, una escuela de vida, un modo propio de seguimiento y de identificación con Cristo. Esa es nuestra aportación. E integrando cuatro pilares básicos de la experiencia Cristiana: El anuncio de la Verdad, la extensión del Reino de Cristo, el amor y la comunión con la Iglesia y la Unidad entre todos.

Puedes apuntarte a los ejercicios espirituales en este enlace.