El Gobierno anuncia una ley para expulsar «automáticamente» a los monjes del Valle de los Caídos
El Gobierno ha anunciado que tras la aprobación del anteproyecto de Ley de Memoria Democrática al que ha dado luz verde este martes en el Consejo de Ministros expulsará a los monjes benedictinos del Valle de los Caídos para convertir en cementerio civil el lugar en el que reposan los restos de miles de personas.
Así lo ha anunciado orgullosa la vicepresidenta Carmen Calvo, donde “resignificar” el Valle de los Caídos es una de las líneas estrella de la ley del Ejecutivo socialista-populista-comunista.
La presencia de los monjes, "incompatible"
En este sentido, Calvo ha indicado que la Fundación de los monjes benedictinos que está presente en el Valle de los Caídos “se extinguirá automáticamente” porque “ya no tiene ningún sentido en relación al nuevo objetivo del Valle de los Caídos en términos de memoria democrática”.
La vicepresidenta insistía en que “la fundación de los benedictinos se extinguirá automáticamente, no está en el objetivo de los fines en los que va a estar el Valle de los Caídos y, entre tanto, hasta que se produce la extinción, habrá un régimen transitorio que regularemos mediante decreto y llevaremos el paraguas de protección y decisión del Consejo de Administración de Patrimonio Nacional, el responsable del Valle de los Caídos”.
Posteriormente, agregó que irán “avanzando en la resignificación”, pero de momento “se convertirá en un verdadero cementerio civil, de respeto y de paz de todas las víctimas que son de los dos bandos”. Y entonces volvió a insistir en que es “incompatible” la presencia de la comunidad monástica con la “resignificación” del Valle.
El derribo de la gran Cruz del Valle de los Caídos no es algo descartable, pues la vicepresidenta Calvo ha afirmado que se “reflexionará” en el Ejecutivo sobre la destrucción de este gran símbolo cristiano.