Ortega Gasset murió besando el crucifijo y confesado, reveló la esposa de Xavier Zubiri en una carta
José Ortega y Gasset (18831955) fue uno de los grandes intelectuales españoles del siglo XX. El autor de La Rebelión de las masas tuvo durante su vida una relación complicada con la Iglesia Católica pero cuando su muerte parecía inminente todo cambió y se reconcilió con el catolicismo y con Dios.
Eso es al menos lo que reveló en una carta la escritora y catedrática Carmen Castro, esposa de Xavier Zubiri, alumno predilecto de Ortega, al capuchino José Gonzalo Zulaica, conocido como padre Donostia, y que ha salido a la luz pública ahora.
Según relata en la misiva, el pensador habría muerto confesado, comulgado y con la bendición papal. En la carta, Carmen Castro escribe: “murió dentro de la Iglesia. De esto no tenemos duda. Besó por dos veces un Cristo llevando él a los labios la mano que lo sostenía. El P. Félix lo confesó –esto, claro se supone porque el P. Félix no puede decirlo-. Lo que sí dice es que le dio la absolución papal”.
Una serie de cartas del colegio Lecároz
El País informa sobre este dato después de que la Asociación de Antiguos Alumnos del Colegio Lecároz (Navarra) haya rescatado esta carta y otra serie de documentos de este centro de enseñanza que fue pionero en su época, que en la actualidad ya no existe.
El capuchino padre Donostía y otros religiosos de este centro recibieron cartas de otros importantes personajes como San Josemería Escrivá, Gregorio Marañón, Joaquín Rodrigo, o Ramón Menéndez Pidal.
Eso es al menos lo que reveló en una carta la escritora y catedrática Carmen Castro, esposa de Xavier Zubiri, alumno predilecto de Ortega, al capuchino José Gonzalo Zulaica, conocido como padre Donostia, y que ha salido a la luz pública ahora.
Según relata en la misiva, el pensador habría muerto confesado, comulgado y con la bendición papal. En la carta, Carmen Castro escribe: “murió dentro de la Iglesia. De esto no tenemos duda. Besó por dos veces un Cristo llevando él a los labios la mano que lo sostenía. El P. Félix lo confesó –esto, claro se supone porque el P. Félix no puede decirlo-. Lo que sí dice es que le dio la absolución papal”.
Una serie de cartas del colegio Lecároz
El País informa sobre este dato después de que la Asociación de Antiguos Alumnos del Colegio Lecároz (Navarra) haya rescatado esta carta y otra serie de documentos de este centro de enseñanza que fue pionero en su época, que en la actualidad ya no existe.
El capuchino padre Donostía y otros religiosos de este centro recibieron cartas de otros importantes personajes como San Josemería Escrivá, Gregorio Marañón, Joaquín Rodrigo, o Ramón Menéndez Pidal.
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