El exorcista de Mallorca, veterano, explica que hace dos o tres exorcismos cada mes
Miquel Adrover, periodista del Diario de Mallorca, ha publicado algunos datos sobre el exorcista de esta diócesis insular, que lleva décadas en el cargo.
"Se trata de un conocido canónigo de la Seu de Mallorca que desde hace muchos años realiza esta función. Accedió a hablar con este periódico bajo la condición de preservar su identidad ante esta labor un tanto controvertida. El religioso relató de forma pormenorizada el rito. Indicó que primero administran el sacramento de la unción de los enfermos, ya que la mayoría de personas que acuden a él son pacientes con dolencias graves o crónicas que en algunos casos pueden estar causadas por la posesión del maligno", explica en su reportaje.
El sacerdote explica: "Practicamos una media de dos o tres exorcismos al mes en Mallorca. Son personas que nos envían los sacerdotes de toda la diócesis y una vez administrados el sacramento de la unción de los enfermos comprobamos si esta persona está poseída por el maligno".
¿El ritual antiguo o el moderno?
Existen dos textos diferentes para arremeter contra la posesión del diablo sobre las personas. Uno más antiguo que, según el exorcista de Mallorca, es mucho más duro con palabras vehementes para conseguir expulsar a Satanás y otro más moderno que cumple la misma función, pero se considera más moderado. Fue el cardenal Ratzinger (quien fuera el papa Benedicto XVI) quien estando al frente de la Congregación para la Doctrina de la Fe autorizó la utilización de los dos textos. En Mallorca utilizan uno u otro en función de la persona poseída.
La impresionante catedral de Palma de Mallorca
"Son textos largos -explica el religioso exorcista de Mallorca- que invocan la acción de Dios sobre la persona y pidiendo que el maligno deje de atormentarlos". Añade que son palabras imperativas que reclaman la fuerza del Espíritu Santo. Después de exponer los textos, que van directamente contra la acción del demonio, se pronuncian varias plegarias de acción de gracias dirigidas a la Virgen.
El proceso culmina salpicando o rociando al poseído con agua bendita con sal y alzando un Cristo ante sus ojos para que culmine la acción de erradicar la presencia del maligno.
El demonio actúa más en el bolsillo
Pese a que el Papa Francisco es de los primeros en hablar del influjo de Satanás sobre las personas, también ha reclamado calma a sus sacerdotes a la hora de determinar si una persona sufre influencias demoníacas o trastornos mentales. De hecho, los exorcistas calculan que solo entre un 2% y un 3% de las personas sufren influencia demoníaca grave, el resto son personas con problemas psicológicos o psiquiátricos.
El exorcista mallorquín concluyó su explicación con una frase de Francisco: "El Papa siempre ha dicho que las personas llevamos al maligno dentro del bolsillo, ya que el demonio adora el dinero".