El castellano es lengua habitual del 30% de los gerundenses
Solo diez parroquias de las 400 de la diócesis de Gerona ofrecen misa en castellano
Son apenas un 2,5 por ciento las parroquias de la diócesis que celebran la misa en español, repartidas en 6 poblaciones. Es más fácil encontrar misa en español en Arizona, California, Florida o Texas.
Según el último estudio oficial de la Generalitat (aquí en PDF con datos de 2008), en las comarcas de Gerona el 29 por ciento de la población declara tener el castellano como su lengua habitual, y un 9 por ciento dice que tanto el castellano como el catalán son su lengua habitual (hay un 51 por ciento de habitantes con el catalán como única lengua habitual, y un 11 por ciento de habitantes con otra lengua habitual).
Sin embargo, solo un 2,5 por ciento de las parroquias de la diócesis celebran la misa en español para ese 29 por ciento de castellanohablantes habituales. A saber:
En Blanes (40.000 habitantes), 3 parroquias: Santa María, la Sagrada Familia y Santa Teresa.
En Calella (18.000 hab.), 1 parroquia: Santa Maria i Sant Nicolau.
En Figueres (44.000 habitantes): Bon Pastor.
En Gerona ciudad (94.000 habitantes), 3 parroquias: Mare de Déu del Carme, Santa Eugènia de Ter, Sant Feliu de Domeny.
En Malgrat de Mar (18.000 hab.): Sant Nicolau
Y en Salt (30.000 hab.): Sant Jaume
En verano, época turística, Santa María, en Castelló d´Empúries y Santa María, en Roses, ofrecen también misa en español. Y este pasado verano lo hizo también la parroquia de Mare de Déu dels Àngels, de Sant Feliu de Guíxols. En invierno se vuelve a la misa solo en catalán.
El resultado es que hay más misas en español en algunas diócesis de California, Arizona, Texas o Florida que en la hispánica e histórica diócesis de Gerona.
La diócesis (que es algo más pequeña que la provincia civil del mismo nombre) cuenta con 740.000 habitantes, de los que un 85 por ciento (630.000) son católicos, y de los que 182.000 serían católicos con el castellano como su lengua habitual. En Gerona ciudad serían 27.000, con tres parroquias para poder rezar a Dios en su lengua habitual.
Gerona es también una de las zonas con más inmigración de España: uno de cada diez habitantes de la provincia es extranjero, pero se concentran en ciertos municipios. Además, tres de cada 10 jóvenes son extranjeros. Sin embargo, los hispanos no son mayoría entre ellos: solo unos 3.000 (si prorrateamos los "no especificados") sobre un total de 13.000 inmigrantes, según el Idescat 2009.
Se puede debatir si la oferta de misas en castellano es suficiente según el perfil lingüístico de cada población (hay más católicos castellanohablantes en ciudades grandes y costeras, turísticas, o con inmigración hispana). Pero el artículo del Diari de Girona muestra que hay algunos curas más interesados en "catalanizar" que en evangelizar y acoger las necesidades de los fieles. Así, recoge declaraciones del rector de Sant Cugat de Salt, Fèlix Mussoll, quien afirma que:
"en los sitios donde he estado, sobre todo en barrios de inmigración de Gerona y Blanes, las misas no las hago solo en castellano [cuando le ha tocado una parroquia que tenía habitualmente misa en castellano, ndReL] sino siempre con elementos en catalán, cada vez más numerosos, para ir avanzando en nuestra lengua. Eso en atención a la gente mayor. Nunca se me han quejado de la misa en catalán, solo en algún caso aislado, llegado siempre de fuera de la comunidad parroquial y con clara ideología españolista. En estos casos respondo que el amor entiende todas las lenguas, y que si tiene buena voluntad y hace tiempo que vive en Cataluña, el catalán se entiende perfectamente".
Es evidente que en un pueblo de mediano tamaño, y no habiendo más alternativas, es difícil para un laico castellanohablante (que, por estadística, podrían ser uno de cada tres, o más) pedirle al párroco que alguna de las misas sea en castellano, y más si ve que éste le va a responder que "por amor y buena voluntad", tiene que aguantarse. Un feligrés que así se evidencia en un pueblo mediano, queda señalado. Incluso si uno entiende el catalán, algo tan íntimo como hablarle a Dios, también a través de la liturgia de la misa, es distinto cuando se hace en el propio idioma que en otro adoptado.
No tenemos datos sobre la práctica religiosa en la diócesis de Gerona, pero como en toda Cataluña es bastante más baja que la media española. Durante la JMJ, la diócesis acogió 6.500 peregrinos extranjeros, cien familias acogieron a unos 230 de ellos en sus casas, y de la diócesis fueron 150 los jóvenes que viajaron a Madrid al encuentro con el Papa.