Hay una constante: la sangre es tipo AB, el tejido es del miocardio y todavía está vivo
México, Venezuela, la India… los milagros eucarísticos se siguen dando y todos desafían a la ciencia
Como católicos, creemos que el pan y el vino utilizados en la Misa se convierten en el cuerpo y la sangre de Cristo. Es una afirmación audaz, especialmente teniendo en cuenta que todavía se ve, se siente, huele y sabe como el pan y el vino. Pero todo cambia cuando se dan evidencias de que la Eucaristía ha cambiado literalmente en el cuerpo y la sangre de Jesús. Ha sucedido a lo largo de la historia, pero como a menudo podemos ser escépticos de los acontecimientos que sucedieron hace mucho tiempo Píldoras de fe ha recopilado una lista de milagros Eucarísticos, los cuales sucedieron en los últimos 25 años.
Milagro Eucarístico en Buenos Aires
Ocurrió en la parroquia de Santa María. Mientras hay dos primeros milagros de los que definitivamente vale la pena averiguar (1992 y 1994), el estudio más interesante e integral se hizo con el Milagro Eucarísitico de 1996. El Milagro sucedió cuando la Eucaristía comenzó a sangrar justo cuando se consagró y parte de ella se convirtió en tejido humano.
Después de varios estudios intensos, se encontró que el tejido era parte de un corazón, un músculo del miocardio, el ventrículo izquierdo, el músculo que da vida a todo el corazón y el cuerpo.
El tejido reveló además que pertenecía a una persona que había sufrido un intenso dolor, experimentando largos períodos de tiempo en los que apenas podía respirar, tenía una tensión inmensa en el corazón (ambos rasgos comunes de la crucifixión) y había sido apuñalado en el lado izquierdo.
Lo que parecía más una locura era que a pesar de que esto debía haber matado a la persona, el tejido mostró señales de estar vivo. Esto se evidenció por glóbulos blancos intactos que se encuentran en el tejido. Esto demostró que, la muestra del corazón estaba aún latiendo, ya que de lo contrario los glóbulos blancos se habrían desintegrado aproximadamente 15 minutos fuera de un cuerpo vivo.
Un dato curioso, el arzobispo encargado de esta investigación fue monseñor Jorge Mario Bergoglio…
Milagro Eucarístico en México
Este sucedió en la Parroquia de San Martín de Tours en Tixtla, el 21 de octubre de 2006. Durante una misa en un retiro de la parroquia, una Hostia que estaba a punto de ser distribuida, comenzó a segregar una sustancia rojiza. La diócesis decidió llevar a cabo un extenso estudio científico de la Hostia para discernir su causa, su origen y asegurarse de que no había ningún engaño.
El estudio tomó varios años, pero sus resultados fueron finalmente publicados en 2013. La sustancia rojiza analizada en la Hostia era de hecho la sangre en la que había ADN y hemoglobinas de origen humano.
Dos estudios realizados por eminentes expertos forenses utilizando diferentes métodos demostraron que la sangre provenía del interior de la Hostia. Esto demostró que no era posible que la sangre fuera colocada en la Hostia de una fuente externa. El tipo de sangre era AB positivo, el mismo tipo que se encuentra en otros milagros eucarísticos y el Santo Sudario de Turín.
Un análisis microscópico de la sangre en 2010 mostró que, desde el 2006, gran parte de la sangre visible había coagulado (como se esperaba), pero que las capas internas subyacentes contenían la presencia de sangre fresca que mostraba que la Eucaristía seguía sangrando.
El tejido humano encontrado en la Hostia estaba vivo, evidenciado por glóbulos blancos y rojos intactos y macrófagos activos. Los estudios inmunohistoquímicos revelaron que el tejido encontrado corresponde al músculo del corazón mencionado en Buenos Aires, el Miocardio.
Con todo, el estudio demostró sin lugar a dudas que este suceso no era de origen natural y fue más allá al vincular este milagro con los otros que ocurren en todo el mundo.
Milagro Eucarístico en la India
La iglesia parroquial de Santa María en Chirattakonam fue testigo de este suceso el 28 de abril de 2001 cuando la iglesia comenzó la Novena a San Judas Tadeo como lo hacían cada año. A las 8:49 am, el sacerdote expuso el Santísimo Sacramento en la custodia para la adoración pública.
Después de unos momentos vieron lo que parecía ser tres puntos en la Sagrada Eucaristía. Ellos oraron a la Hostia por un tiempo y luego fue colocada seguro en el tabernáculo.
El sacerdote se dirigió al arzobispo de la diócesis para informarle del cambio pero cuando regresó a la parroquia y abrió el tabernáculo, se había desarrollado un acontecimiento asombroso, ya que ahora claramente en la Eucaristía había, no sólo los tres puntos rojos, sino un rostro coronado con una corona de espinas.
Se sugiere que los tres puntos rojos se refieren a las tres heridas que Santo Tomás pidió ver de Jesús antes de creer que se había levantado de entre los muertos, un pensamiento agravado por el hecho de que esta era la lectura del día. La Eucaristía permanece hasta hoy y es a menudo adorada por los fieles.
Milagro Eucarístico en Venezuela
El 8 de diciembre de 1991, en el Santuario Mariano de Finca Betania en Cúa, el sacerdote acababa de dividir la gran Hostia consagrada en cuatro partes y consumía una de esas piezas, como es normal en la Misa.
Cuando colocó las piezas restantes en la patena, notó que una de las piezas tenía ahora una mancha roja y de ella salía una sustancia roja, similar a la forma en que la sangre escapa de una herida. Los numerosos peregrinos que estaban allí inmediatamente verificaron que la sangre no venía del sacerdote.
La Hostia continuó produciendo sangre fresca, y el entonces obispo de Los Teques pidió una serie de estudios para probar la aparición milagrosa de la Eucaristía. La Hostia fue analizada por 500 comisiones de la Organización Mundial de la Salud y se confirmó que la sangre del sacerdote no coincidía con la de la Eucaristía.
Los estudios demostraron que la sangre provenía del interior de la Hostia y coincidió con la de otros milagros eucarísticos, siendo de nuevo el tipo de sangre AB positivo y el tejido de un corazón vivo.
Lo que se muestra en este video a continuación, ocurrió en una manifestación milagrosa de esta Eucaristía Sangrante (7 años después de haber ocurrido el milagro) durante la celebración de una Misa de adoración. Mientras los fieles adoraban y elevaban sus oraciones, la Hostia sangrante parecía estar envuelta en una especia de fuego sobrenatural. El evento fue registrado por uno de los presentes.
Es posible ir y ver a la Hostia Milagrosa todos los días del año a cualquier hora en el convento de las Monjas Agustinas Recoletas del Sagrado Corazón de Jesús en Los Teques.
El Milagro Eucarístico de Polonia
En la iglesia parroquial de San Antonio de Sokółka, el 12 de octubre de 2008, una Hostia consagrada cayó accidentalmente al suelo durante la celebración de la misa y cuando el sacerdote lo notó creyó que estaba sucia y la colocó en un vasculum (un pequeño recipiente lleno de agua) para disolverla y así dispensarla de una manera apropiada.
Más tarde, cuando se volvió a sacar la Hostia, aunque estaba parcialmente disuelta, todavía estaba allí y lo que se pensaba que era "suciedad" era, de hecho, lo que parecía un coágulo de sangre.
Se siguió un estudio intenso y dos científicos de fama mundial y especialistas en anatomía patológica en la Universidad Médica de Białystok fueron llamados a dirigir la investigación, la Profesora Maria Elżbieta Sobaniec-Łotowska y el Profesor Stanisław Sulkowski.
Estos dos científicos estudiaron el "coágulo de sangre" independientemente uno del otro y utilizaron los microscopios ópticos más modernos y el microscopio electrónico de transmisión.
Para asegurarse de que no había sesgo en el estudio, el profesor Sulkowski no fue informado de que la muestra que estaba examinando provenía de una Hostia. A pesar de esto, ambos científicos llegaron a la misma conclusión: la muestra examinada no era ni un coágulo, ni sangre... era un tejido muscular cardiaco humano (tejido del corazón) y todavía estaba vivo.
Los detalles de la condición del corazón son los mismos que los mencionados anteriormente, pero lo más increíble de este estudio fue que, debido a la naturaleza avanzada de los equipos que utilizaron, fueron capaces de observar que el tejido cardíaco se unió a la Hostia consagrada de una manera inseparable. No hay explicación científica para esto; se penetraron unos a otros, como si un fragmento de pan se hubiese transformado repentinamente en cuerpo: "Incluso los científicos de la NASA, que tienen a su disposición las más modernas técnicas analíticas, no podrían recrear artificialmente tal evento", afirmó el profesor Sobaniec-Łotowska.