Sucedió en 2013: investigado, se aprueba y se expone
La Iglesia reconoce el milagro de una hostia sangrante en Polonia: es tejido de corazón humano
Zbigniew Kiernikowski, obispo de Legnica (Polonia), ha aprobado oficialmente este 17 de abril que los fieles veneren una hostia sangrante que, según decreta, “tiene las características distintivas de un milagro eucarístico”. (Ver abajo el vídeo con la catequesis del padre Santiago Martín sobre este milagro.)
El milagro sucedió en la Navidad de 2013, cuando una hostia consagrada cayó al suelo en el santuario polaco de San Jacek en Legnica, según reconoce el obispo en su comunicado.
La hostia fue recogida y colocada en un recipiente con agua ("vasculum") para que se consumiera, como suele hacerse en estos casos. Sin embargo, en la hostia apareció una mancha roja de extraña textura, que parecía tejido humano.
El entonces obispo de Legnica, Stefan Cichy, instituyó una comisión para investigar el hecho y ver qué sucedía con la forma. En febrero de 2014, con permiso de la diócesis, un fragmento de esta hostia con la sustancia roja se colocó en un corporal y se llevó a investigar bajo microscopio a distintos institutos forenses.
Análisis histopatológico
El comunicado médico final del Departamento de Medicina Forense encontró que “en la imagen histopatológica se encontró que los fragmentos contienen partes fragmentadas del músculo estriado transversal, similar al músculo del corazón”.
Son estas pruebas las que determinaron que el tejido era de origen humano y que incluso precisaban que era un tejido que había estado sometido a tensión y sufrimiento.
La nota del obispo resume así las conclusiones de los científicos: "En la imagen histopatológica, se ha descubierto que los fragmentos de tejido contienen partes fragmentadas de músculo estriado transversal. (…) El conjunto (…) se asemeja en gran medida al músculo cardiaco con las alteraciones que aparecen frecuentemente durante la agonía. Los estudios genéticos indican el origen humano del tejido".
Consultando a Doctrina de la Fe en Roma
Después de la investigación científica, el obispo Kiernikowski pasó el caso en enero de este año a la consideración teológica de la Congregación para la Doctrina de la Fe en el Vaticano.
Doctrina de la Fe se mostró favorable a exponer la hostia a la veneración pública, en un contexto de explicación de los hechos, y así se le encargó al párroco, Andrzej Ziombrze.
La hostia con el aspecto de tejido corporal humano
La hostia se expone en una capilla junto a iconos de Juan Pablo II y con un plafón explicativo de la reliquia y su significado.
El comunicado del obispo afirma: "Pido también información pertinente para quienes acudan y una catequesis sistemática que forme adecuadamente la conciencia de los fieles en el culto eucarístico". "Espero que todo esto sirva para profundizar en el culto de la Eucaristía y tenga un inconfundible impacto en la vida de las personas se acercan a la reliquia. Lo vemos como una maravillosa muestra, una expresión particular de la bondad y el amor de Dios".
Un plafón explica el milagro de la hostia sangrante y su sentido
San Jacek, un santo eucarístico medieval
En www.jacek.iq.pl, una web dedicada a la devoción a San Jacek, el santo sacerdote polaco del siglo XIII al que está dedicada la iglesia de los hechos (también llamado a veces San Jack y San Jacinto) se llama la atención sobre el hecho de que este santo polaco fue un gran predicador de la Eucaristía y adorador del Santísimo, y que en la iconografía se le representa con la Eucaristía en las manos.
Dicen sus biógrafos que en 1240 los mongoles atacaron la ciudad de Kiev, donde el santo estaba rezando ante el Santísimo. Al saber que la ciudad caía en manos de los bárbaros, tomó el Santísimo y se disponía a emprender la huida. Pero entonces oyó una voz desde la imagen de alabastro de la Virgen: "Jacek, ¿cómo te escapas y me dejas sola? Llévame contigo". "Madre querida, esta estatua es muy pesada, ¿cómo voy a llevarla?", dijo él. "Mi Hijo hará que sea ligera, tómala", dijo la Virgen. Efectivamente, la estatua se hizo ligera como una pluma y Jacek puso al Santísimo y la estatua bajo su manto. Acompañado de otros religiosos consiguió cruzar el río y atravesar el campamento mongol milagrosamente, sin ser detectado.
San Jacek en su parroquia: un ángel le ayuda a llevar la estatua de la Virgen, otro la eucaristía
Jacek fue canonizado en el siglo XVI, en plena controversia con los vecinos protestantes que negaban el valor sacramental de la Eucaristía y la veneración especial a María: como reacción, Jacek (Jacinto, en el proceso de canonización romano) aparece en iconos, pinturas y esculturas con la Virgen en una mano y la Eucaristía en la otra.
Los devotos de San Jacek quieren remarcar que el obispo de Legnica apruebe y anuncie al mundo el milagro eucarístico un 17 de abril, aniversario de la canonización de este santo, que tiene fama de taumaturgo también en nuestros días, y cuyos favores y milagros modernos se recogen en la web a él dedicada.
También se ha señalado que este milagro eucarístico se aprueba cuando Polonia está casi a punto de celebrar su 1050 aniversario de bautismo, origen de la nación como tal, y también que el reconocimiento llega a tiempo para las Jornadas Mundiales de la Juventud que se celebran en Cracovia este verano.
La catequesis del padre Santiago Martín sobre este milagro