Los católicos mexicanos declaran la guerra a la «revolución educativa de las conciencias» de Obrador

Independencia, Reforma, Revolución… y Cuarta Transformación: mientras que los tres primeros son los hitos históricos más relevantes en la historia del México contemporáneo, la conocida como 4T sería el último de estos acontecimientos que proponen seguir "cambiando el país", según su promulgador, el presidente Andrés Manuel López Obrador.

En varias ocasiones el mandatario a afirmado que sus principales objetivos son acabar con la pobreza y la corrupción, calificando el proyecto de dimensiones históricas. Sin embargo, conforme se aplica, los católicos mexicanos observan que la conocida como 4T no es sino la continuación de un recorrido histórico que tendrá nuevamente a la Iglesia y la familia, si no como su principal objetivo, una de sus primeras afectadas.

"Plantearse el objetivo de cambiar al país yo creo que es loable Si se logra, será para el beneficio de los mexicanos y del país. Estamos en una oportunidad histórica que hay que aprovechar y buscar la manera de saldar los rezagos históricos", declaró en octubre a BBC Mundo Jesús Ramírez, portavoz del gobierno.

Los católicos mexicanos, una poderosa fuerza social en el país que abarca según los censos  cifras de entre el 78% y el 80% de la población, no opinan lo mismo.

Contra el adoctrinamiento del gobierno 

De hecho, se encuentran actualmente "en pie de guerra" contra el gobierno por la plasmación de la  Cuarta Transformación en la educación a través de libros gratuitos que se distribuirán en las escuelas para el curso que comienza a finales del mes de agosto. Libros que, según sus críticos, no solo están cargados de "adoctrinamiento", sino también de "errores e imprecisiones" en el contenido.

Aunque el poder judicial mexicano ha ordenado paralizar y revisar las ediciones de los libros, el pasado 1 de agosto el mismo Obrador retó al máximo organismo de justicia asegurando que proseguirá la impresión y distribución de los mismos.

"Van a llegar para el inicio de clases, el día 28 de agosto. Van a estar ya los libros y no hay ningún juicio de amparo que impida el que se distribuyan", declaró el presidente.

Pero, ¿qué ha llevado a qué multitud de asociaciones católicas y los mismos obispos mexicanos se declaren en oposición abierta al gobierno? Las declaraciones de Obrador tuvieron lugar horas después de que se filtrase el contenido de algunos de los libros que se pretenden distribuir. Y para no pocos representantes de la Iglesia, suponen, además de errores,  una auténtica "revolución de las conciencias" y un "plan de adoctrinamiento".

Graves errores e imprecisiones históricas 

Respecto a los errores, la doctora en Pedagogía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Irma Villalpando, cuestionó en El País tras revisar el contenido de los libros una reducción excesiva de temas relacionados a matemáticas, errores en los conceptos, saltos en los contenidos, desorden de los materiales y la exclusión de la literatura universal.

Uno de los errores más polémicos y sonados ha sido en la fecha de nacimiento de Benito Juárez, uno de los máximos exponentes en la configuración del México contemporáneo, que presidió entre 1858 y 1872. Según los documentos, el mandatario nació el 18 de marzo de 1806, cuando realmente nació el 21 del mismo mes.   

"Nace en Oaxaca, el 18 de marzo de 1806", dicen sobre Benito Juárez los nuevos libros que pretende distribuir el gobierno de Obrador en México a los estudiantes.  

Alma Maldonado, especialista en Educación del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional (Cinvestav), o Israel Sánchez, de la Unión Nacional de Padres de Familia, han sido otros de los especialistas que no han ocultado la baja calidad de los libros, además "plagados de errores".

También se critica, al margen de las denuncias de la Iglesia, que los libros se hayan diseñado sin definir siquiera los programas de estudios o sin tener en cuenta a los actores sociales, familias o educadores.

La oposición de las diócesis: "El pueblo ha dicho basta"

Por su parte,  los obispos de la Iglesia mexicana tampoco han dudado en cuestionar los documentos del gobierno.

La diócesis de Campeche, en la última editorial de su boletín El Observador, afirma que de lo que realmente se trata esta remodelación educativa es de "aplicar un plan de adoctrinamiento y de implantación de la ideología de género". En este sentido, se menciona la aplicación de "un nuevo idioma español" plagado de errores, la "revolución de las conciencias" y el "adoctrinamiento".

"El pueblo bravo ha dicho basta a tanta manipulación, y más ahora que el adoctrinamiento pretende ir sobre sus hijos; lo han dicho muy claro: la educación se da en casa y la enseñanza (de la buena) en la escuela. No hay más", sentenció la diócesis.

La diócesis de Chihuahua se ha sumado al cuestionamiento de los nuevos libros de texto gratuitos a través de su portavoz, Gustavo Sánchez Prieto, tras declarar al diario La Opción la "incomodidad" manifiesta "como cristianos y como católicos".

Entre algunos errores, incidió en la fecha de Juárez o en la inclusión de la ideología de género en los procesos educativos, donde a su juicio la identidad, la sexualidad, el matrimonio o la familia se están banalizando "por una intención o un deseo" como si no hubiera "ningún sustento anatómico" o "ninguna base natural".

Alguno de los contenidos ideológicos de género presentes en los libros gratuitos que pretende distribuir el gobierno de México. 

Tomás Cruz Perales, portavoz de la arquidiócesis de San Luis de Potosí, rechazó igualmente el adoctrinamiento de unos materiales que, recordó, "nunca sustituyen ni determinan lo que se construye en el hecho educativo, que es siempre encuentro entre personas; sólo la persona educa a la persona". En este sentido, alentó a los padres de familia a supervisar la educación de sus hijos, previniendo de un adoctrinamiento que "no es nuevo", sino que "siempre ha existido" junto con la "formación en ideologías".

"Provocaremos una detonación nacional"

Semejantes planteamientos expresó el Frente Nacional por la Familia este 13 de agosto. Se trata de una influyente organización católica que cuenta con grandes apoyos entre  el episcopado mexicano. Recientemente avisó de próximas y "fuertes movilizaciones de protesta" en todo el país por unos contenidos que llaman a los niños a elegir el “género” de su preferencia, independientemente de su sexo biológico; se les enseña que una familia puede estar encabezada por dos homosexuales o dos lesbianas –la “homoparental” o “lesbomaternal”–; y, además, se les adiestra en la práctica de la masturbación y el travestismo, entre otras “innovaciones” pedagógicas.

Rodrigo Iván Cortés Jiménez, dirigente nacional del FNF, advirtió: “No vamos a quedarnos de brazos cruzados si al inicio de clases se comienzan a utilizar estos libros aberrantes. ¡No! ¡Nada de eso! Vamos a realizar fuertes movilizaciones de protesta en los distintos estados. Provocaremos una detonación a nivel nacional”.

"En materia de educación sexual, contienen una fuerte ideología de género que afectará mucho a nuestros niños. Les causará mucha confusión sobre su sexualidad. Ahí hasta se les pone a emular un proceso de masturbación. ¡Es terrible! Esos libros contienen además un exaltado culto al régimen y minimizan la enseñanza científica. Y esto es sólo la cuestión del fondo, de su contenido", agregó Jiménez.