El secreto impera en gran medida sobre las sesiones del sínodo para la Amazonia, y parece deducirse que muchas cosas que se están oyendo no son del agrado del Papa, afirma el padre Santiago Martín. La enorme polémica generada en torno a esta reunión sinodal puede servir al menos, afirma, para que se conozca el alcance de la enfermedad que aqueja a la Iglesia.