Tras el Real Decreto del 1 de febrero
Concentración de «simios» ante la sede del PP para exigir igualdad de trato para los fetos humanos
Actualmente está más protegido en España un embrión de mono que de persona.
Este domingo por la mañana un grupo de "simios" le han dado las gracias a Mariano Rajoy en la calle Génova, 13, sede nacional del Partido Popular, por protegerles tanto, pero clamando también por el derecho a la vida de los humanos.
El Gobierno aprobó el pasado 1 de febrero un Real Decreto para proteger a los simios y a sus fetos, mientras promueve la experimentación embrionaria de humanos y mantiene y permite la legislación socialista del derecho al aborto, que ha segado la vida de más de 118.000 bebés no nacidos en el último año. El Gobierno sigue incumpliendo sus promesas también en materia de la defensa de la vida humana del no nacido.
Encabezados por su presidente, Ignacio Arsuaga, los delegados y voluntarios de Derecho a Vivir, reunidos en Madrid para su V Encuentro, se sumaron a los "simios" que defienden a los humanos llevando en cajas 400.000 firmas de españoles por el Aborto Cero.
Y también recordaron en un Manifesto que "el Tribunal de Justicia de la Unión Europea estableció en una sentencia del 18 de octubre de 2011 que los seres humanos tienen dignidad en todas las etapas de su desarrollo. En concreto, ha reconocido el respeto que merece la dignidad humana desde el momento de la concepción, rechazando las patentes científicas que requieran la destrucción previa de embriones humanos o su utilización como materia prima".
A pesar de ello, lamentaron, España subvenciona "proyectos de investigación con células madre embrionarias humanas a través del Banco de Líneas Celulares dependiente en última instancia del Ministerio de Sanidad", cuya titular es Ana Mato.
El Gobierno aprobó el pasado 1 de febrero un Real Decreto para proteger a los simios y a sus fetos, mientras promueve la experimentación embrionaria de humanos y mantiene y permite la legislación socialista del derecho al aborto, que ha segado la vida de más de 118.000 bebés no nacidos en el último año. El Gobierno sigue incumpliendo sus promesas también en materia de la defensa de la vida humana del no nacido.
Encabezados por su presidente, Ignacio Arsuaga, los delegados y voluntarios de Derecho a Vivir, reunidos en Madrid para su V Encuentro, se sumaron a los "simios" que defienden a los humanos llevando en cajas 400.000 firmas de españoles por el Aborto Cero.
Y también recordaron en un Manifesto que "el Tribunal de Justicia de la Unión Europea estableció en una sentencia del 18 de octubre de 2011 que los seres humanos tienen dignidad en todas las etapas de su desarrollo. En concreto, ha reconocido el respeto que merece la dignidad humana desde el momento de la concepción, rechazando las patentes científicas que requieran la destrucción previa de embriones humanos o su utilización como materia prima".
A pesar de ello, lamentaron, España subvenciona "proyectos de investigación con células madre embrionarias humanas a través del Banco de Líneas Celulares dependiente en última instancia del Ministerio de Sanidad", cuya titular es Ana Mato.
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