La Santa Sede amplia de nuevo las indulgencias por los difuntos a todo el mes de noviembre

Tradicionalmente los días 1 y 2 de noviembre, es decir, los días de todos los santos y los fieles difuntos, respectivamente, es posible ganar la indulgencia plenaria que aligere o evite el paso por el purgatorio a quien reza por los difuntos en esta fecha señalada.

El pasado año y debido a la excepcionalidad provocada por la pandemia, con confinamientos y limitaciones de movilidad, la Penitenciaría Apostólica ampliaba estas indulgencias a todo el mes de noviembre para así ayudar a los fieles.

Este 2021, y ante las peticiones de numerosos obispos, el penitenciario mayor, el cardenal Piacenza, ha publicado un nuevo decreto en el que vuelve a establecer estas indulgencias para todo el mes de noviembre de manera análoga al 2020.

De este modo, el pasado 27 de octubre, este nuevo Decreto de la Penitenciaría Apostólica establecía la posibilidad de ganar indulgencias plenarias en la conmemoración de todos los fieles difuntos durante todo el mes de noviembre.  La justificación se establece en la persistencia de la pandemia y las medidas vigentes en varias partes del mundo para intentar contenerla.

Numerosas "súplicas" de obispos

Esta decisión se ha tomado –explica el texto- tras haber escuchado "las diversas súplicas recibidas recientemente de varios Sagrados Pastores de la Iglesia, debido al estado de pandemia que continúa".

La Penitenciaría Apostólica, por tanto, "confirma y prorroga para todo el mes de noviembre de 2021 todos los beneficios espirituales ya concedidos el 22 de octubre de 2020".

Así, los fieles podrán obtenerla tras visitar un cementerio y rezar por los difuntos, o ir piadosamente a una iglesia u oratorio y rezar allí el Padre Nuestro o el Credo. Y todo ello durante todo el mes de noviembre. A todo ello hay que sumarle las condiciones generales para todas las indulgencias.

Por su parte, los ancianos, los enfermos y todos aquellos que por motivos graves no puedan salir de casa, por ejemplo por las restricciones impuestas por las autoridades, podrán lograr la indulgencia si están unidos espiritualmente al resto de fieles y se comprometen a intentar cumplir cuanto antes con las tres condiciones (confesión sacramental, comunión y oración por el Santo Padre).

Lograr "vigor espiritual"

Esta ampliación de las indulgencias ofrece –según asegura el penitenciario mayor- varios beneficios: “De la renovada generosidad de la Iglesia los fieles sacarán ciertamente intenciones piadosas y vigor espiritual para dirigir su vida según la ley del Evangelio, en comunión filial y devoción al Sumo Pontífice, fundamento visible y Pastor de la Iglesia Católica”.

En cuanto a la relación entre la solemnidad de Todos los Santos y la conmemoración de los difuntos, el Penitenciario Mayor recordaba en una reciente entrevista en Vatican News que "estamos llamados en estos días a reavivar nuestra certeza en la gloria y la bienaventuranza eternas" y recomendó: "pidamos humildemente y con confianza perdón por los que nos han dejado, por sus pequeñas o grandes faltas, ellos que sin embargo ya están salvados en el amor de Dios, y renovemos nuestro compromiso de fe".