Benedicto XVI, en Alemania con su hermano Georg: «Puede ser la última vez que se vean en este mundo»

Este jueves, Benedicto XVI ha viajado desde el monasterio Mater Ecclesiae en el Vaticano hasta la ciudad alemana de Ratisbona/Regensburg, para estar junto a su hermano de 96 años, quien se encuentra enfermo. Georg Ratzinger, tres años mayor que el Papa emérito, no está hospitalizado, sino que se encuentra convaleciente en su domicilio.

Benedicto XVI viajó acompañado de su secretario, el arzobispo Georg Gaenswein, así como de un médico y un enfermero y del vicecomandante de la Gendarmería del Vaticano. Viajó en avión hasta Múnich, donde fue recibido por el obispo de Ratisbona, Rudolf Voderholzer, quien le acompañó desde el aeropuerto de la capital bávara hasta su destino, a poco más de cien kilómetros de distancia.

Según declaró el director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni, la estancia del Papa emérito en su país natal durará "el tiempo necesario" y se alojará en el seminario diocesano. Por el momento no se han facilitado imágenes de este viaje, considerado privado y "profundamente personal", por lo que no habrá apariciones públicas, según informa Vatican News.

Todo hace pensar que la situación de Georg Ratzinger es grave, y el presidente de la conferencia episcopal alemana, Georg Bätzing, ha lamentado que el regreso de quien "ha sido miembro de nuestra conferencia episcopal durante varios años" se deba a "una ocasión triste". Según Clemens Neck, portavoz de la diócesis de Ratisbona, "puede ser la última vez que ambos hermanos, Georg y Joseph, se vean en este mundo".

Es la primera vez que Benedicto XVI abandona Italia desde su renuncia al pontificado, que anunció el 11 de febrero de 2013 y se hizo efectiva el 28 de febrero. El 13 de marzo fue elegido Francisco.

Los hermanos Ratzinger están muy unidos, y fueron ordenados sacerdotes el mismo día, el 29 de junio de 1951. Posteriormente sus caminos se separaron, pero desde que Joseph fue elegido Papa en 2005 las visitas de su hermano fueron frecuentes, primero al Palacio Apostólico y luego al monasterio Mater Ecclesiae.

"Desde que nací, mi hermano ha sido para mí no solo un compañero, sino también un guía en quien confiar", dijo Benedicto XVI en 2008, cuando la localidad de Castelgandolfo otorgó a Georg la ciudadanía honoraria: "Siempre ha supuesto un punto de orientación y de referencia con la claridad y la determinación de sus decisiones".