«No podemos esperar», dice el hieromonje Juan (Guayta)
El viaje de Francisco a Turquía parece haber hecho mella en la actitud del Patriarcado de Moscú
"No podemos esperar": así titulaba el pasado 3 de diciembre el sitio ortodoxo ruso Bogoslov un largo artículo firmado por el hieromonje Juan (Guayta) en el que, después de resumir los aspectos más destacados de la visita de Papa al Patriarca de Constantinopla, reflejaba la urgencia para la Iglesia ortodoxa de superar el "callejón sin salida" en el que se encuentra el diálogo ecuménico.
El hieromonje Juan, que durante años ha trabajado en el Departamento de Relaciones Exteriores del Patriarcado de Moscú, destaca las señales que el Papa está lanzando a la Iglesia rusa para superar las barreras que dividen a las dos comunidades.
Tanto es así que, incluso en la cuestión de los uniatas (católicos de rito oriental), "por primera vez un pontífice romano ha dicho algo que coincide con la posición de los ortodoxos".
La opinión del hieromonje Juan (Guayta), aunque no representa oficialmente al Patriarcado de Moscú, tiene un peso relevante.
El largo artículo, traducido parcialmente por AsiaNews, plantea cómo debe responder el Patriarcado de Moscú al llamado que hizo Francisco, de que "la unidad es un camino, un camino que se debe hacer, que se debe hacer juntos".
El encuentro de Francisco con Bartolomé
El monje Juan se refiere al discurso de Francisco tras la liturgia en la catedral de San Jorge, sede del Patriarcado de Constantinopla: "El Papa conectó de forma sencilla y clara el diálogo teológico entre católicos y ortodoxos (que en los últimos tiempos está en un punto muerto) con el componente carismático, la búsqueda personal y la espiritualidad de la unidad entre la tradición cristiana de Oriente y Occidente".
"Para alcanzar la plena unidad, la Iglesia católica no pretende imponer ninguna exigencia", dijo entonces Francisco, lo cual el hieromonje vincula al hecho de que, "desde el inicio de su pontificado, se ha presentado urbi et orbi, no como un Papa o el Papa, sino como el obispo de la Iglesia de Roma, que preside en la caridad".
Ese primer "improvisado saludo" que dirigió Jorge Mario Bergoglio a la Cristiandad desde el balcón de la Plaza de San Pedro "muestra claramente no sólo sus dones humanos y espirituales, sino que contiene in nuce su eclesiología" y refleja "su comprensión del primado como un servicio en la caridad. Es difícil en la historia de la Iglesia católica en los últimos siglos poder encontrar otro ejemplo de pontífices romanos que de manera tan explícita se califiquen a sí mismos sólo como obispo de Roma", añade Juan (Guayta), aunque Francisco, que ha usado esa expresión profusamente, también se ha referido a sí mismo como Papa en numerosas ocasiones.
La declaración del avión sobre los uniatas
Durante el vuelo de regreso a Roma, a preguntas de un periodista ruso sobre las perspectivas de diálogo con el Patriarcado de Moscú, Francisco dijo: "Primero me referiré a toda la Ortodoxia, y luego «llegaré» a Moscú. Creo que con la Ortodoxia estamos en camino. Ellos tienen los sacramentos, la sucesión apostólica... estamos en camino. ¿Qué debemos esperar? ¿Que los teólogos se pongan de acuerdo? Nunca llegará ese día, se lo aseguro, soy escéptico".
Y, sobre los uniatas: "Voy a decir una cosa que tal vez alguno no puede entender, pero ... Las Iglesias orientales católicas tienen derecho a existir, es cierto. Pero uniatismo es una palabra de otra época. Hoy no se puede hablar así. Se debe encontrar otra vía".
Según Juan (Guayta), el Papa "ha eliminado así, con una sola frase, podría decirse, el obstáculo que ha existido entre ortodoxos y católicos durante muchos siglos (el II Concilio de Lyon tuvo lugar en 1274), y que se había convertido en los últimos tiempos en el principal escollo para el diálogo. Por primera vez un Romano Pontífice ha expresado una opinión sobre esta controversia, que coincide con la posición de los ortodoxos. Recientemente, la Iglesia ortodoxa rusa insistió en el hecho de que, en el futuro, la cuestión del primado tendrá que abordarse cada vez más, en el marco de la Comisión Mixta para el diálogo teológico, en paralelo con la evaluación del fenómeno del uniatismo".
Y añade: "Se puede decir que el 30 de noviembre de 2014, la Iglesia católica no sólo ha aceptado las condiciones impuestas por la Iglesia rusa, sino que su jefe supremo, con su declaración inesperada, ha desaprobado el fenómeno del Uniatismo".
"La unidad es un camino, un camino que se debe hacer, que se debe hacer juntos", dijo también el Papa en ese avión. "¿Reaccionará la Iglesia Ortodoxa Rusa a estas palabras?", apunta el hieromonje Juan (Guayta): "¿O la voz de los problemas internos resonará para nosotros más fuerte que la oración del Salvador por la unidad de sus discípulos y sus seguidores en los siglos venideros?".
El hieromonje Juan, que durante años ha trabajado en el Departamento de Relaciones Exteriores del Patriarcado de Moscú, destaca las señales que el Papa está lanzando a la Iglesia rusa para superar las barreras que dividen a las dos comunidades.
Tanto es así que, incluso en la cuestión de los uniatas (católicos de rito oriental), "por primera vez un pontífice romano ha dicho algo que coincide con la posición de los ortodoxos".
La opinión del hieromonje Juan (Guayta), aunque no representa oficialmente al Patriarcado de Moscú, tiene un peso relevante.
El largo artículo, traducido parcialmente por AsiaNews, plantea cómo debe responder el Patriarcado de Moscú al llamado que hizo Francisco, de que "la unidad es un camino, un camino que se debe hacer, que se debe hacer juntos".
El encuentro de Francisco con Bartolomé
El monje Juan se refiere al discurso de Francisco tras la liturgia en la catedral de San Jorge, sede del Patriarcado de Constantinopla: "El Papa conectó de forma sencilla y clara el diálogo teológico entre católicos y ortodoxos (que en los últimos tiempos está en un punto muerto) con el componente carismático, la búsqueda personal y la espiritualidad de la unidad entre la tradición cristiana de Oriente y Occidente".
"Para alcanzar la plena unidad, la Iglesia católica no pretende imponer ninguna exigencia", dijo entonces Francisco, lo cual el hieromonje vincula al hecho de que, "desde el inicio de su pontificado, se ha presentado urbi et orbi, no como un Papa o el Papa, sino como el obispo de la Iglesia de Roma, que preside en la caridad".
Ese primer "improvisado saludo" que dirigió Jorge Mario Bergoglio a la Cristiandad desde el balcón de la Plaza de San Pedro "muestra claramente no sólo sus dones humanos y espirituales, sino que contiene in nuce su eclesiología" y refleja "su comprensión del primado como un servicio en la caridad. Es difícil en la historia de la Iglesia católica en los últimos siglos poder encontrar otro ejemplo de pontífices romanos que de manera tan explícita se califiquen a sí mismos sólo como obispo de Roma", añade Juan (Guayta), aunque Francisco, que ha usado esa expresión profusamente, también se ha referido a sí mismo como Papa en numerosas ocasiones.
La declaración del avión sobre los uniatas
Durante el vuelo de regreso a Roma, a preguntas de un periodista ruso sobre las perspectivas de diálogo con el Patriarcado de Moscú, Francisco dijo: "Primero me referiré a toda la Ortodoxia, y luego «llegaré» a Moscú. Creo que con la Ortodoxia estamos en camino. Ellos tienen los sacramentos, la sucesión apostólica... estamos en camino. ¿Qué debemos esperar? ¿Que los teólogos se pongan de acuerdo? Nunca llegará ese día, se lo aseguro, soy escéptico".
Y, sobre los uniatas: "Voy a decir una cosa que tal vez alguno no puede entender, pero ... Las Iglesias orientales católicas tienen derecho a existir, es cierto. Pero uniatismo es una palabra de otra época. Hoy no se puede hablar así. Se debe encontrar otra vía".
Según Juan (Guayta), el Papa "ha eliminado así, con una sola frase, podría decirse, el obstáculo que ha existido entre ortodoxos y católicos durante muchos siglos (el II Concilio de Lyon tuvo lugar en 1274), y que se había convertido en los últimos tiempos en el principal escollo para el diálogo. Por primera vez un Romano Pontífice ha expresado una opinión sobre esta controversia, que coincide con la posición de los ortodoxos. Recientemente, la Iglesia ortodoxa rusa insistió en el hecho de que, en el futuro, la cuestión del primado tendrá que abordarse cada vez más, en el marco de la Comisión Mixta para el diálogo teológico, en paralelo con la evaluación del fenómeno del uniatismo".
Y añade: "Se puede decir que el 30 de noviembre de 2014, la Iglesia católica no sólo ha aceptado las condiciones impuestas por la Iglesia rusa, sino que su jefe supremo, con su declaración inesperada, ha desaprobado el fenómeno del Uniatismo".
"La unidad es un camino, un camino que se debe hacer, que se debe hacer juntos", dijo también el Papa en ese avión. "¿Reaccionará la Iglesia Ortodoxa Rusa a estas palabras?", apunta el hieromonje Juan (Guayta): "¿O la voz de los problemas internos resonará para nosotros más fuerte que la oración del Salvador por la unidad de sus discípulos y sus seguidores en los siglos venideros?".
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