Entregan al Ayuntamiento de Castellón 17.000 firmas para evitar la retirada de la cruz de Ribalta
La Plataforma en Defensa de la Cruz del Ribalta ha entregado esta mañana en el registro del ayuntamiento de Castellón las cerca de 17.000 firmas recogidas durante estos últimos meses, a raíz de la intención del consistorio castellonense de retirar la Cruz del Parque del Ribalta.
Los miembros de la plataforma han solicitado en su petición que la Cruz del Ribalta, que lleva ya 73 años en el parque, considerado un Bien de Interés Cultural, se mantenga en su actual emplazamiento.
En un comunicado la portavoz del equipo de Gobierno y concejala de Cultura, Verónica Cruz, manifestó hace unos días que en 2018 se retirará de su actual lugar, alegando que de esta manera se cumple la Ley de Memoria Histórica.
Sin embargo, el monumento está dedicado a todas las víctimas de la violencia desde el año 1979, tras un acuerdo al que llegaron todas las fuerzas políticas del momento, incluidos los partidos socialista y comunista, por lo que para los miembros de la Plataforma es más “un intento de eliminar cualquier símbolo cristiano de la vía pública.”
Acciones legales contra los responsables
La Asociación de Abogados Cristianos, como representación legal de la Plataforma, ha anunciado que, en caso de aprobarse la retirada, presentará una denuncia contra la alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, por prevaricación al entender que con esta medida se está actuando contra la libertad religiosa de los católicos y contra sus símbolos.
A su vez, la Asociación animará a más castellonenses a que denuncien lo que consideran un "atropello", y para ello colgará en su página web un modelo de denuncia para que todo el que quiera pueda denunciar también semejante ilegalidad.
Los miembros de la plataforma han solicitado en su petición que la Cruz del Ribalta, que lleva ya 73 años en el parque, considerado un Bien de Interés Cultural, se mantenga en su actual emplazamiento.
En un comunicado la portavoz del equipo de Gobierno y concejala de Cultura, Verónica Cruz, manifestó hace unos días que en 2018 se retirará de su actual lugar, alegando que de esta manera se cumple la Ley de Memoria Histórica.
Sin embargo, el monumento está dedicado a todas las víctimas de la violencia desde el año 1979, tras un acuerdo al que llegaron todas las fuerzas políticas del momento, incluidos los partidos socialista y comunista, por lo que para los miembros de la Plataforma es más “un intento de eliminar cualquier símbolo cristiano de la vía pública.”
Acciones legales contra los responsables
La Asociación de Abogados Cristianos, como representación legal de la Plataforma, ha anunciado que, en caso de aprobarse la retirada, presentará una denuncia contra la alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, por prevaricación al entender que con esta medida se está actuando contra la libertad religiosa de los católicos y contra sus símbolos.
A su vez, la Asociación animará a más castellonenses a que denuncien lo que consideran un "atropello", y para ello colgará en su página web un modelo de denuncia para que todo el que quiera pueda denunciar también semejante ilegalidad.
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