Clara respuesta de la Fundación Jérôme Lejeune a Arcadi Espada, que ve «inmoral» tener niños Down
El pasado domingo en el canal de televisión Cuatro, el presentador de Chester, el polémico Risto Mejide entrevistó al también polémico periodista y escritor Arcadi Espada, programa que acabó con uno levantándose del plató para marcharse y el otro expulsándole del programa.
Toda la polémica vino salpicada por las declaraciones de Espada sobre las personas con discapacidad y sobre su defensa del aborto de personas como los síndrome de Down. No es nueva la defensa que este periodista ha hecho de la eugenesia y de la aniquilación de los discapacitados en el vientre de su madre. Esto Risto lo sabía, y aficionado como es a la polémica, le preparó una ofensiva en este sentido para que al final ocurriera lo que tenía que pasar, y que ha repercutido muy favorablemente en la audiencia y repercusión del programa.
Espada, defensor de la eugenesia
Tampoco faltó hipocresía en el propio presentador. Risto Mejide atacó duramente a Arcadi Espada por defender el aborto de los discapacitados e incluso llevó al plató al padre de un niño con síndrome de Down. Pero Mejide es un firme defensor del aborto, y lo ha repetido en numerosas ocasiones, incluso utilizándolo como argumento contra otros entrevistados.
Durante la entrevista, Arcadi Espada afirmó que “hay personas que consideran que, si alguien les detecta un niño enfermo, tienen todo el derecho a seguir adelante con el niño enfermo”, lo que para él es una “inmoralidad”.
Como el vídeo no se oye (los duendes de Twitter) os lo pongo otra vez pic.twitter.com/oTjRNR82by
— Carla T. (@eledhmel) 18 de febrero de 2019
Aunque intentó suavizar la situación asegurando que él no obligaría a los padres abortar sí llegó a afirmar que “si el servicio público de salud detecta una persona con una anomalía grave que va a impedir que lleve una vida normal, y digo normal con el pleno uso y conciencia de por qué uso esta palabra” puede tener a su hijo, pero “cuídese de él, porque si el servicio público le ha avisado a usted de que esa persona va a nacer con gravísimas deficiencias que van a suponer para la sociedad un costo que podría haberse evitado, usted evidentemente deberá asumir: primero, la responsabilidad moral de haber traído en esas condiciones un hijo al mundo; dos, la responsabilidad económica de mantener a ese hijo en las condiciones necesarias para la persona y su dignidad”.
La respuesta de la Fundación Jérôme Lejeune
Ante estas declaraciones, la Fundación Jérôme Lejeune España, que lleva el nombre del científico provida que descubrió la trisomía 21, ha contestado al periodista catalán en un comunicado que separa en estos cuatro puntos:
1. La existencia de una patología o enfermedad en el ser humano no le niega su realidad personal. Es decir, las personas lo son por el mero hecho de serlo, no porque vivan en determinadas condiciones de idoneidad ni mucho menos porque otras personas les reconozcan su ser personal. Y, precisamente por esta realidad personal, cada ser humano es sujeto de derechos fundamentales que no pueden ser vulnerados por otros. Todo ser humano tiene derecho a vivir, independientemente de las condiciones en que se produzca esta vida. Por tanto, negar a una persona el derecho a la vida es siempre una vulneración de derechos. Los padres que reconocen en sus hijos su derecho a vivir no hacen sino reconocerles su ser persona. Obligar a un padre a violentar los derechos de su hijo, como obligándole a quitarle la vida mediante el aborto provocado, sí que sería una grave inmoralidad, además de contrario a toda justicia y ordenamiento jurídico.
2. El síndrome de Down no es una enfermedad, es una condición genética que se expresa a través de unas condiciones concretas, entre las que destaca la discapacidad intelectual. Pero afirmar que las personas con síndrome de Down son enfermas es un error a todas luces.
3. La sociedad española ha aprendido el valor de la justicia y de la dignidad de cada persona, reconociendo los derechos fundamentales de todos mediante la Constitución de 1978 y la ratificación de numerosos tratados internacionales, entre ellos la Declaración Universal de los Derechos del Hombre. Esto nos ha permitido reconocer la grandeza de cada uno, más allá de las condiciones en que se desarrolle su vida y su devenir. Por ello, no nos sorprendemos ante el hecho de que muchos padres acojan en sus familias hijos con discapacidad o enfermedad de cualquier tipo. Es más, sabemos, por propia experiencia, que la presencia de estas personas en las familias es, en la gran mayoría de las ocasiones, oportunidad de crecimiento y superación para todos sus miembros. La belleza de la vida se manifiesta siempre que se le deja manifestarse y, de forma especialmente intensa, en la realidad de la discapacidad y la asunción del reto que representa.
4. Es obligación del servicio público de salud en España respetar el derecho de toda persona a la asistencia sanitaria. El diagnóstico médico está llamado a ser la herramienta que permita el ejercicio de este derecho, y no la privación del mismo. Los españoles nos sentimos orgullosos de haber construido entre todos un servicio público de salud que respeta las normas de la justicia, la equidad y la proporcionalidad. Lamentamos que haya ciudadanos que no compartan la función de este servicio público.