El anuncio podría ser dado en agosto
San Juan de Ávila, patrono del clero secular español, podría ser proclamado «doctor de la Iglesia»
La Iglesia cuenta con 33 doctores, entre ellos tres mujeres. La última en ser declarada doctora fue Santa Teresita de Lisieux en 1997.
La Congregación para la Causa de los Santos del Vaticano examinó este martes la proclamación como "doctor de la Iglesia" del español San Juan de Avila, un título otorgado en contadas ocasiones por la Iglesia católica, indicó la agencia de noticias religiosas I.Media.
El anuncio podría ser dado en agosto, precisó la misma fuente. La Iglesia católica cuenta con sólo 33 doctores en 2.000 años de historia, entre ellos tres mujeres. La última persona que fue proclamada "doctor de la Iglesia" fue la santa francesa Teresa de Lisieux o Santa Teresita del Niño Jesús (18731897).
San Juan de Ávila y su obra
En 1997, el Papa Juan Pablo II hizo de ella la 33ª doctor de la Iglesia, y es conocida como la "Doctora del Amor". San Juan de Ávila, nacido en Almodóvar del Campo, cerca de Toledo (España), el 6 de enero de 1500, era de ascendencia judía y sus padres poseían unas minas de plata en Sierra Morena y falleció en Montilla, donde está enterrado, en 1569.
Empezó a estudiar leyes en Salamanca en 1514, pero lo dejó empujado por su devoción y se retiró a su natal Almodóvar, donde hizo vida de dura penitencia. Escribió un célebre comentario al salmo XLIV Audi filia, et vide para una señora convertida por él, que fue publicado en Alcalá clandestinamente en 1556 y más tarde ampliado.
Esa obra puede considerarse un verdadero compendio de ascética, y el rey Felipe II la tuvo en tanta estima que pidió que no faltara nunca en El Escorial. Su enorme ascendiente como predicador provocó envidias y algunos clérigos le denunciaron ante la Inquisición sevillana en 1531. Desde ese año hasta 1533, Juan de Ávila estuvo encarcelado y fue procesado por la Inquisición.
Se le atribuye con gran fundamento el soneto anónimo "No me mueve, mi Dios, para quererte..." que es una de las joyas de la mística castellana. El Apostól de Andalucía, como solía ser llamado, era un convencido de la necesidad de la reforma, y para llevarla adelante creía en reformar al clero. San Juan y San Ignacio de Loyola (14911556) mantuvieron un importante intercambio de cartas.
Igualmente mantuvo contactos con Santa Teresa de Avila (15151582) y fundó semninarios y universidades. Doctor de la Iglesia es el título que el Papa otorga oficialmente a ciertos santos para reconocerlos como eminentes maestros de la fe para los fieles de todos los tiempos. Los "doctores de la Iglesia" han ejercido una influencia especial sobre el desarrollo del cristianismo, sentando las bases de la doctrina sucesiva.