El fraile de 84 años y 1.500 belenes

El fraile capuchino Conrado Estruch ha repartido hoy entre más de 200 familias alimentos, ropa y juguetes adquiridos con los donativos logrados con los 1.500 belenes elaborados con materiales inservibles que expuso los días previos a la Navidad a las puertas del convento de la calle Cirilo Amorós, 67, en donde se exhibía la muestra.

Este martes, a las 11 horas, un camión descargó los productos obtenidos con los donativos realizados por los visitantes de la exposición de belenes, que han ascendido a más de 12.000 euros.

Posteriormente, el reparto se desarrolló en el mismo convento en donde les ha acompañado el propio religioso capuchino, según han indicado hoy a la agencia AVAN fuentes del convento.

La recaudación ha sido destinada a la atención de doscientas familias valencianas sin recursos económicos, a la Casa Cuna Santa Isabel, al Cottolengo, a Provida, a conventos de clausura de Valencia y a misioneros de la orden capuchina en Guinea Ecuatorial, Bolivia, Colombia y Honduras.

El arzobispo de Valencia bendijo el pasado día 4 en el convento capuchino de San José la muestra de belenes solidarios, que quedó agotada en dos semanas.

En la iniciativa colaboró con el fraile, natural de Ador y de 84 años, el grupo Amigos de San Antonio, fundado por el propio capuchino.

Entre los nacimientos, este año los ha habido hechos con teléfonos móviles en desuso, alpargatas valencianas, calabazas, piñas, maderas o calculadoras averiadas. Otros han sido colocados en un coche de Fórmula 1 de juguete o en una máquina de escribir antigua.