«CONTRIBUYÓ CON SUS PROPIOS PADECIMIENTOS»
El cardenal Cañizares realiza una apasionada defensa de la Virgen como «corredentora»
La discusión teológica sobre la participación de la Virgen María en la redención se remonta a los primeros siglos del cristianismo, aunque no ha sido hasta los últimos 200 años cuando más se ha hecho incapié en ello. El Cardenal Cañizares, prefecto del Culto Divino, defiende el «quinto dogma» mariano con fuerza en el prólogo de un libro.
El cardenal Antonio Cañizares Llovera, prefecto de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, ha prologado la primera versión completa en español de «La Amarga Pasión de Cristo» (Voz de Papel), recopilación de las visiones de la beata Anna Catalina Emmerich sobre la que se basó la exitosa película dirigida por Mel Gibson y protagonizada por el actor Jim Caviezel.
A juicio del purpurado, «de este libro emana vigorosamente la persuasión de que los protagonistas principales fueron dos: Jesús y su Madre. En realidad, este libro hubiera podido titularse, sin faltar a la verdad, "La Amarga Pasión de Nuestro Señor Jesucristo y su Santísima Madre", pues la virgen participó constantemente en los dolores físicos y morales de su hijo, y este libro resalta su papel de corredentora principal del género humano». «La Virgen, que era exclusivamente humana, contribuyó a la redención del género humano con sus propios padecimientos asociados a los de su Hijo», enfatiza el cardenal.
En el prólogo de la obra que ha traducido íntegramente del alemán José María Sánchez de Toca y cuyo título original es «La Amarga Pasíón de Nuestro Señor Jesucristo, según la contempló la religiosa agustina de Dülmen anotada por Clemente Brentano», el cardenal Cañizares destaca que aunque «las visiones de este libro son revelaciones privadas que nadie está obligado a creer» y que «no son dogma de fe y no añaden nada al depósito de la fe que custodia la Iglesia» son «una conmovedora ayuda para acercarnos a contemplar la Pasión de Cristo, esclarecen poderosamente nuestra comprensión de los hechos, y nos ponen cara a cara con nuestras responsabilidades y contradicciones».
«Las visiones de la beata Ana Catalina no son el credo ni los evangelios, pero robustecen nuestra fe, estimulan nuestro amor y fortalecen nuestra esperanza».
A juicio del purpurado, «de este libro emana vigorosamente la persuasión de que los protagonistas principales fueron dos: Jesús y su Madre. En realidad, este libro hubiera podido titularse, sin faltar a la verdad, "La Amarga Pasión de Nuestro Señor Jesucristo y su Santísima Madre", pues la virgen participó constantemente en los dolores físicos y morales de su hijo, y este libro resalta su papel de corredentora principal del género humano». «La Virgen, que era exclusivamente humana, contribuyó a la redención del género humano con sus propios padecimientos asociados a los de su Hijo», enfatiza el cardenal.
En el prólogo de la obra que ha traducido íntegramente del alemán José María Sánchez de Toca y cuyo título original es «La Amarga Pasíón de Nuestro Señor Jesucristo, según la contempló la religiosa agustina de Dülmen anotada por Clemente Brentano», el cardenal Cañizares destaca que aunque «las visiones de este libro son revelaciones privadas que nadie está obligado a creer» y que «no son dogma de fe y no añaden nada al depósito de la fe que custodia la Iglesia» son «una conmovedora ayuda para acercarnos a contemplar la Pasión de Cristo, esclarecen poderosamente nuestra comprensión de los hechos, y nos ponen cara a cara con nuestras responsabilidades y contradicciones».
«Las visiones de la beata Ana Catalina no son el credo ni los evangelios, pero robustecen nuestra fe, estimulan nuestro amor y fortalecen nuestra esperanza».
FICHA TÉCNICA | COMPRA ONLINE | |||
Título: | La Amarga Pasión de Cristo | Voz de Papel | ||
Autor: | Ana Catalina Emmerich | |||
Editorial: | Voz de Papel | |||
Páginas: | 327 páginas | |||
Precio | 17 euros | |||
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