A ALUMNOS DE 13 Y 14 AÑOS
Denuncian que la Comunidad de Madrid enseña a poner condones con penes de plástico
La asociación Profesionales por la Ética ha denunciado que «en la Comunidad de Madrid las palabras van en una dirección y las obras por otro», al desarrollar modelos de educación afectivo sexual en sus colegios sin tener en cuenta el derecho de los padres a decidir sobre estas cuestiones. «Estamos hartos de que se presione a los objetores», aseguran.
La asociación Profesionales por la Ética (PPE) ha deunciado públicamente que en colegios de la Comunidad de Madrid se desarrollan actividades edutativas que contradicen el discurso de la presidenta Esperanza Aguirre contrario a Educación para la Ciudadanía y el adoctrinamiento escolar.
En concreto, PPE ha denunciado que en el Instituto de Enseñanza Secundaria de la Ciudad de los Ángeles, se está enseñando a los alumnos de segundo curso de la Educación Secundaria Obligatoria, a colocar un preservativo con reproducciones a tamaño natural de penes erectos hechos de plástico.
Para el secretario general de Profesionales por la Ética, Fabián Fernández de Alarcón, este tipo de actividades, que además se apoyan en el libro «En tu casa o en la mía» de la sexóloga Lorena Berdún, «ponen de manifiesto que en la Comunidad de Madrid las palabras van en una dirección y las obras por otro».
Fernández de Alarcón también subraya que «estamos hartos de que en los centros educativos de Madrid se presione a los padres objetores a EpC y estamos ahrtos de que se imponga a los chavales un determinado modelo de educación afectivo-sexual».
Del mismo modo, desde PPE se hace hincapié en que el discurso teórico de la presidenta de la Comunidad de Madrid no se compdece con la firma de la institución estampada en un convenio de formación de profesores de EpC con la Fundación socialista CIVES.
Por último, esta asociación, que ha aglutinado el movimiento objetor de los padres ante el adoctrinamiento escolar, has destacado que la Consejería de Educación aún «no ha dado ninguna indicación a los inspectores y profesores madrileños sobre cómo aplicar las sentencias del Tribunal Supremo de febrero de 2009 que prohibñian expresamente la imposición de criterios sobre cuestiones morales controvertidas».