133 años de prisión al excoronel Montano por ordenar el asesinato de 5 jesuitas españoles en 1989
Finalizaba 1989, el mundo cambiaba y se estaba acabando la Guerra Fría; el comunismo ya no gobernaba en Polonia, ni Hungría ni Checoslovaquia... Los 5 jesuitas españoles y sus compañeros asesinados por órdenes de la cúpula militar salvadoreña en noviembre de 1989 figuran entre las últimas víctimas de una época bipolar. Si alguien hubiera decidido aplazar el asesinato unos meses, quizá no se habría producido ya.
Ahora, pasados más de 30 años, por fin hay una persona condenada por aquella matanza. La Audiencia Nacional española ha condenado al excoronel y exviceministro de Seguridad Pública de El Salvador, Inocente Orlando Montano, a 133 años y cuatro meses de prisión como responsable de haber planeado y ordenado la matanza.
En la madrugada del 16 de noviembre de 1989, un grupo de soldados del batallón Atlacatl irrumpió en la Universidad Centroamericana (UCA) y mató a tiros a seis sacerdotes jesuitas: los españoles Ignacio Ellacuría, Ignacio Martín-Baró, Segundo Montes, Amando López, Juan Ramón Moreno, y el salvadoreño Joaquín López. Esa noche también acabaron con la vida de la mujer e hija del encargado de seguridad de la universidad, Elba y Celina Ramos.
Aunque en la vista oral el exmilitar se declaró inocente, el tribunal lo ha declarado culpable de cinco delitos de asesinato de carácter terrorista, por los cuales le impone una pena de 133 años de prisión, cuatro meses y cinco días. El tribunal español no puede condenarle por los asesinatos del jesuita salvadoreño, la cocinera y la hija adolescente de ésta -aunque considera acreditado que es también culpable de ellos- porque no ha sido extraditado por EEUU por esos crímenes.
El tribunal español ha establecido un máximo de 30 años de cumplimiento efectivo de la condena, un período al que habrá que restarle el tiempo que lleva en prisión provisional (desde 2017).
Estaba implicado el entonces presidente salvadoreño, Cristiani
Dicen los magistrados que los ocho asesinatos "fueron urdidos, planeados, acordados y ordenados por los miembros del alto mando de las Fuerzas Armadas, órgano al que pertenecía Inocente Orlando como viceministro de la Seguridad Pública", quien participó en la decisión por la cual se "transmitió la orden de realizar las ejecuciones al coronel director de la Escuela Militar", Guillermo Benavides, un mando medio que es el único condenado en El Salvador.
El tribunal español considera acreditado que en la masacre participó un grupo violento y estable compuesto por el entonces presidente de la República, Alfredo Cristiani (actualmente tiene 72 años), altos cargos y miembros de la Tandona, como se llamaba a la promoción de oficiales que ocupaba las más altas estructuras del poder en El Salvador. Los jueces españoles aseguran, 3 décadas después, que usaban la violencia y los delitos "con el fin de perpetuar sus privilegiadas posiciones".
Ellos, continúa la Sala, "cometieron los asesinatos después de intentar hacer creer a la opinión pública que tanto Ignacio Ellacuría como el resto de sacerdotes pertenecían al liderazgo intelectual del Frente para la Liberación Nacional Farabundo Martí, generando la falsa afirmación de la existencia de un enemigo infiltrado en las estructuras de las sociedad, que actuaban como agentes de una confabulación socialista-comunista".
Ante una gran expectación internacional, los jueces de la Audiencia Nacional han leído su fallo pasada la una de la tarde de este viernes.
Los telenoticiarios del mundo entero transmitieron las imágenes de los cadáveres tirados por el césped de la universidad
"Fue terrorismo de Estado", dice la sentencia
El acusado, durante su declaración en el juicio, aseguró en un primer momento que “no tenía ninguna animadversión a los jesuitas”, pero acabó arremetiendo contra ellos asegurando -sin prueba alguna- que estaban detrás del golpe de Estado de 1979 contra el Gobierno militar y que respaldaban a los “terroristas” de la guerrilla revolucionaria del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN).
Muchos indicios refuerzan la culpabilidad de Montano: llegan de la Fiscalía, la Comisión de la Verdad de El Salvador, de documentos desclasificados de Estados Unidos del Departamento de Estado, la CIA y el Departamento de Defensa...
Uno de los autores materiales del crimen, el exteniente Rene Yusshy Mendoza, lo señaló en la Audiencia Nacional como uno de los militares que ordenó la masacre. Mendoza, que lleva años colaborando con la justicia, situó a Montano en la reunión clave donde se acordó el asesinato múltiple.
Momento del juicio en Madrid en que René Yusshy Mendoza describe el ataque y la matanza
El exviceministro acabó huyendo del país y refugiándose en EE UU, que acordó su entrega a España en 2017 tras una larga batalla judicial.
“Ha quedado acreditado que los miembros del alto mando de las Fuerzas Armadas salvadoreñas, como núcleo decisor colegiado, entre los que se encontraba Montano, decidieron ejecutar a la persona que de forma más intensa y efectiva impulsaba, desarrollaba e intentaba llevar a las dos partes en conflicto a la paz”, reza este fallo histórico de la Audiencia Nacional. Dieron, dice la sentencia, “la orden directa" para “ejecutar a Ellacuría, sin dejar testigos vivos de ello”. “Fue terrorismo de Estado”, apostilla la resolución.
La sentencia considera que el jesuita Ignacio Ellacuría, (nacido en Portugalete, Vizcaya, en 1930), que apostaba por un díalogo entre el régimen y el FMLN, eran “uno de los analistas políticos más importantes de El Salvador”. “El papel de la Iglesia como mediadora para tratar de acabar con la sangrienta guerra civil les granjeó la enemistad de la extrema derecha, quien temía que en la negociación se les privase de sus privilegios”, detalla el texto de la sentencia.
Los jesuitas satisfechos: perdón, pero con verdad
Tras conocer la sentencia, el provincial de los Jesuitas en España, Antonio España SJ, ha valorado positivamente la sentencia. "Mostramos nuestra satisfacción porque el principio de Justicia Universal, aplicado en España, haya servido para avalar jurídicamente una verdad acreditada a través de numerosos testimonios, pruebas documentales e investigaciones, que apuntaron desde un principio a la responsabilidad de las fuerzas armadas y el Estado salvadoreño en el crimen y su encubrimiento", ha declarado en un comunicado.
Añade que "la sentencia sobre Inocente Montano no agota las responsabilidades individuales en aquellos hechos", señala España. "Por ello, confiamos en que facilite la labor de la justicia en El Salvador, allí donde mayor contribución puede hacer al reconocimiento a las víctimas", añade el provincial de los Jesuitas.
En El Salvador debería realizarse el juicio referente a las 3 víctimas salvadoreñas. "La Compañía de Jesús en Centroamérica y la UCA seguirán trabajando, como han hecho hasta ahora, en favor de un juicio justo en El Salvador, tal y como anunciaron en el comunicado que emitieron conjuntamente el pasado 7 de junio", ha señalado el provincial español de los jesuitas.
El comunicado de los jesuitas, como en anteriores ocasiones, recuerda que "los jesuitas hemos expresado nuestra disposición a perdonar a quienes planearon y ejecutaron ese horrendo crimen, pero antes es necesario que se reconozcan los hechos, se esclarezca la verdad y se determinen las responsabilidades correspondientes".
Reportaje en RTVE recordando los hechos y las imágenes de la matanza y su contexto, a inicios del juicio hace unos meses