Una vocación dedicada exclusivamente a la adoración perpetua: así son las Esclavas del Santísimo
El centro de Almería esconde un secreto: un lugar que pasa desapercibido y que, en medio del ruido, las oficinas y el tráfico, ofrece un lugar donde encontrar silencio y contemplación. Es la Iglesia del Corazón de Jesús, capilla de las Esclavas del Santísimo y María Inmaculada, una congregación que tiene como carisma y misión la adoración perpetua de la Eucaristía y que celebrará, el este sábado 30 de abril, a las 19:00, 30 años de presencia en Almería.
Actualmente, 11 religiosas de clausura, dos de ellas jóvenes almerienses, dedican su vida a la adoración (en turnos las 24 horas del día) y a la confección de prendas litúrgicas, y dan la oportunidad para que todos los almerienses (de 7:00h a 20:00h ininterrumpidamente) puedan encontrarse con Jesús-Eucaristía.
Rosario, una niña que no quería dejar solo a Jesús
La historia de esta congregación comenzó con una joven inquieta, Sor María Rosario Lucas Burgos, nacida en Almería el 27 de febrero de 1909. El día que recibió su primera comunión, el 24 de mayo de 1919, se consagró a la Inmaculada Concepción. A Rosario le impresionó desde niña la “soledad de Jesús en el tabernáculo de amor” según sus propias palabras. Así, tomó la inquebrantable resolución de ser religiosa para adorar al Santísimo durante las 24 horas del día y “llevar a todo el orbe la devoción al Santísimo Sacramento”.
Dificultades serias surgidas en los primeros años de la fundación, mueven a la fundadora a buscar en la Compañía de Jesús, algún padre que la orientara y guiara. Allí encontró al P. José Antonio Aldama. Y se produjo el providencial encuentro de los dos fundadores de un instituto que diera culto al Santísimo Sacramento en íntima unión con la virgen Inmaculada. El día 7 de octubre de 1948 se celebra la erección canónica de la nueva congregación y, más tarde, llega su expansión en distintos conventos en España (Córdoba, Girona, Granada, Cuenca…) y otros países de Latinoamérica (Guatemala, Perú y Puerto Rico).
La Esclavas del Santísimo viven estos 30 años de presencia en Almería como un momento de acción de gracias e invitan a todos los almerienses a visitarlas y conocer más el carisma de esta congregación nacida en nuestra tierra.
(Información publicada originariamente en Ecclesia)