Más de 100.000 falleros acuden en Valencia a ofrecer sus claveles a la Virgen de los Desamparados

Más de cien mil falleros, falleras y músicos están participando en la Ofrenda de flores a la Virgen de los Desamparados que comenzó este domingo en Valencia, y que continúa este lunes. Los falleros han desfilado ya por miles hasta la plaza de la Mare de Déu, ante la imagen de la patrona que cada año se instala frente a su Basílica.

La jornada de este domingo se ha iniciado a las 15.30 horas y concluyó pasada la medianoche con el desfile de la Fallera Mayor Infantil, Sara Larrazábal, y su Corte de Honor.  En este segundo día de la Ofrenda, las fallas empezarán sus recorridos también a las 15.30 horas y la jornada finalizará cuando la Fallera Mayor de Valencia, Marina Civera Moreno, pase ante la patrona de los valencianos, junto con su Corte.

Según recoge el Arzobispado de Valencia, en la Ofrenda toman parte falleros de cerca de 400 comisiones falleras de la capital valenciana y de poblaciones del área metropolitana, integradas en la Junta Central Fallera. Además, también participan representantes de las casas regionales de otras comunidades autónomas con sede en la ciudad y de las fiestas de Alicante y Castellón.

Claveles blancos para la Mare de Déu

El manto de la Mare de Déu está siendo “tejido” con “alrededor de 60.000 ramos de claveles, en su mayoría blancos, sobre el 80 por ciento”, que colocan los Vestidors de la Verge en la imagen de la patrona que cada año se instala frente a su Basílica, según su coordinador José García Bosch.

Además de los ramos que portan las falleras, las comisiones y casas regionales “también depositarán cestas y canastillas florales a los pies de la imagen y en el interior de la Basílica”, ha explicado.

Igualmente, junto a la imagen de la Virgen se colocará una imagen de San José, propiedad de Junta Central Fallera, que fue restaurada por petición del coordinador de los Vestidors, y que será decorada en la Ofrenda con flores precisamente por su nieto, Juan García Rueda, de 15 años y vestidor desde el año pasado, “un encargo que le he hecho como una petición especial, para toda su vida”, ha explicado García Bosch.