La Fundación Cultural Herrera Oria y el CEU IAM Business School, en Madrid, se adelantan a Asís 2020
Un liderazgo empresarial más social y más cristiano vale la pena: ciclo Economía de Francesco
¿Qué es Francesco Economy, la economía de Francesco? No es necesariamente "la economía del Papa Francisco" -aunque él impulse unos encuentros- sino más bien una economía que ponga en el centro a la persona, el bien común y el cuidado de la creación, inspirándose en San Francisco de Asís.
En marzo de 2020 en Italia, en Asís, jóvenes economistas y emprendedores de todo el mundo, siempre menores de 35 años, se reunirán para compartir ideas y
acciones que encajen bien en una economía orientada según la Doctrina Social de la Iglesia. Les invita el Papa; el obispo de Asís, Domenico Sorrentino; el profesor de economía Luigino Bruni y el dicasterio vaticano de Desarrollo Humano Integral, presidido por cardenal Turkson.
En España, ciclo Economía de Francesco con el CEU
¿Y en España? En España proponen una línea similar, orientada por una visión católica de la responsabilidad social corporativa, la Fundación Cultural Angel Herrera Oria y la escuela de negocios del CEU IAM Business School, obras ambas de la Asociación Católica de Propagandistas. Lo hacen con la iniciativa Economía de Francesco (más datos en su web aquí).
Se trata de una serie de conferencias presenciales y de pequeñas entrevistas que se van a difundir también por el canal de Youtube de la Fundación Cultural Ángel Herrera Oria y que a medio plazo incluirá "unas conclusiones que se publicarán y unas recomendaciones o buenas prácticas que vamos a compartir y empezar a aplicar en las empresas cercanas al CEU y la ACdP, para probar en qué medida se pueden asumir y cumplir", explica Fernando Lostao, director-gerente de la Fundación Cultural Ángel Herrera Oria.
La Fundación ya empezó a trabajar estos temas de economía del bien común hace 4 años, con un grupo de trabajo impulsado por Francisco Molina, pero con la aportación de Carlos Piñeyroa, un experto que trabajó hace unos años en Cáritas en Zaragoza y hoy trabaja en temas de economía e innovación social. "Estábamos dando vueltas a nuevas posibilidades de actuación, cuando salió la convocatoria del Papa Francisco, la cita de Asís de marzo de 2020, sobre una economía que pone a la persona en el centro. Y decidimos
hacer un trabajo previo en España", explica Fernando Lostao.
Fernando Lostao, director de la Fundación Cultural Ángel Herrera Oria, ante algunas de las obras del CEU y la ACdP en Madrid
"Uno de nuestros compañeros jóvenes, Fernando Bonete, fue seleccionado para ser uno de los 500 emprendedores, economistas y change makers de Asís. Hasta hace poco era director del periódico El Debate de Hoy . Es nuestro embajador de este ciclo. En Valencia entroncamos con un trabajo paralelo de profesores especialistas, como Enrique Lluch, profesor de la Universidad CEU Cardenal Herrera, experto en Doctrina Social, que nos envían sus conclusiones", añade Lostao.
Una economía más ética buscará mejorar en tres niveles: el bienestar de las personas (incluyendo los trabajadores, clientes, proveedores...), el cuidado del medio ambiente y una mayor transparencia y gobernanza laboral.
Cada vez más eso incluye "que se oigan también las voces de los trabajadores, a veces también de colaboradores y proveedores, incluso si no es de manera vinculante", explica Lostao. Este tipo de ideas se pueden extender en las empresas, por ejemplo, mediante certificaciones de buenas prácticas.
Ideas prácticas que se puedan aplicar ya
Más allá de las reglas generales sobre economía y bien común que marca la doctrina social católica, lo que se busca ahora es reflexionar sobre su aplicación concreta en nuestra sociedad, en nuestros empleos y ritmos de vida. Lostao pone algunos ejemplos para reflexionar. "Una práctica muy sencilla pero poco implantada en España podría ser el teletrabajo. Ya se hace algo en España, pero en nuestro país aún hay demasiado presentismo. El teletrabajo puede tener efectos positivos en la vida personal y familiar, en el impacto medioambiental (menos desplazamientos), en ayudar a repoblar lugares hoy abandonados..."
Por el momento, el ciclo Economía de Francesco llega a su público: estudiantes y académicos del mundo de la empresa o de las ciencias socioeconómicas; también a gente del mundo de la comunicación, a todo el que trabaje en administración y dirección de empresa, a la gente de derecho empresarial y mercantil...
"En este ciclo veremos distintas propuestas intermedias entre la empresa con y sin ánimo de lucro. Algunas legislaciones en el mundo ya reconocen las empresas 'de interés colectivo'. En España tenemos modelos como las cooperativas o las cajas rurales. De hecho España ha contado con diversos modelos cooperativos. El Movimiento de los Focolares desde hace décadas ofrecen su modelo de economía de comunión, que usan muchas empresas. Y todo eso sin poner en riesgo el beneficio empresarial", añade Lostao.
El director de la Fundación Cultural Herrera Oria señala que "no importa solo el balance financiero; el economista Christian Felber habla, por ejemplo, de un 'balance del bien común'. Hay legislaciones que miden este bien -que incluye la satisfacción de los trabajadores, el beneficio ambiental, etc...- y lo premian con beneficios fiscales adicionales. Hay Estados que premian fiscalmente, por ejemplo, a las empresas que reducen la diferencia entre sus sueldos más altos y los más bajos. En este ciclo de Economía de Francesco los ponentes comentan este tipo de medidas".
El economista Christian Felber enseña a hacer un balance de bien común
Pese a todo, tanto en Asís como en Madrid, lo que se hace ahora -y lo que pide el Papa- es pararse a reflexionar, a examinar las posibilidades. "Ponemos sobre la mesa modelos muy distintos y variados, que además no están cerrados, están en crecimiento", explica Lostao. "Y no es lo mismo aplicar estas ideas en una pequeña empresa que apenas se mantiene a flote, con sueldos muy justos, que en grandes corporaciones con salarios a veces miserables y que en cambio remuneran mucho el capital".
Después de un par de sesiones de Economía de Francesco, dice Lostao, "lo que más nos satisface es ver que en los asistentes se despierta inquietud por saber más y por trabajar estos temas de forma transversal en nuestros centros. Y nos alegra ver que acuden profesores eméritos, veteranos, de varias universidades, que participan muy activamente. Se juntan los jóvenes y los mayores y se despiertan conciencias y eso nos gusta".
Un problema en España: endogamia en entidades católicas
Sobre estos temas y su implicación en ambientes católicos nos habla también Álvaro Rico, director del CEU IAM Business School, una escuela de ejecutivos nacida en 2016. Tiene unos 450 alumnos al año, por lo general profesionales de nivel intermedio, que llevan trabajando ya 10 o 15 años y buscan actualizarse o mejorar en temas de metodologías o tecnología. Este centro, con sus profesionales y alumnos, participa también en Economía de Francesco.
Pedimos a Álvaro Rico que puntúe del 1 al 10 el compromiso en economía social de las entidades académicas y económicas católicas en España. Les da un 4,5, "un suspenso cerca del aprobado". ¿La causa? Demasiada endogamia, pocas ganas de "salir fuera" y aprender de otros. ¡Incluso pocas ganas de enseñar a otros!
Álvaro Rico, director del CEU IAM Business School
"En España las entidades católicas, y también los movimientos católicos, son muy endogámicos. Cada entidad hace bastantes cosas, pero sólo con los suyos y para los suyos. Nos abrimos poco a los demás, y tampoco nos esforzamos en llegar al debate social. A veces nos subimos a los caballos de otros en vez de trabajar nuestras propias herramientas", explica.
"En nuestras escuelas enseñamos liderazgo, pero precisamente el liderazgo consiste en atraer la acción y motivación de otros. El Papa Francisco, con esta iniciativa de Asís y con otras, anima siempre a salir. Cuando preparamos Economía de Francesco hacíamos una lista de ponentes e invitados y nos dijimos 'cuidado, no invitemos a los ya convencidos, hay que ir a los profesionales', a la gente que puede aprender de esto, incorporarlo..."
Álvaro Rico cree que hay una nueva generación de ejecutivos en la que estos conceptos son bien aceptados. "El empresario hoy tiene más conciencia de que el éxito empresarial es el del equipo, toma sus decisiones teniendo en cuenta al empleado, al proveedor, al cliente... Ya lo vemos en las nuevas generaciones de directivos en grandes compañías, y las pequeñas imitarán a las grandes. Aunque a veces adopten prácticas por decreto ley, otras veces ven claramente que es más rentable".
Rico cree que en la empresa, como en la fe y en la educación, "lo mejor es dar ejemplo". "Está bien hablar de ética en las aulas. Pero un ejecutivo, o un alumno de Empresariales, lo que hará es fijarse en el ejemplo que le da quien se presenta como modelo. Lo que más cala es tener delante profesionales que explican en qué acertaron y en qué se equivocaron, que muestran su tesón, su constancia, sus valores. ESo es lo que abre los ojos del que quiere aprender".
Álvaro Rico cree que en los temas de responsabilidad social los cristianos tienen mucho que decir. "Durante años los cristianos hemos estado algo adormecidos. Además, nos repetían eso de 'puedes ser bueno sin ser cristiano'. Pero en el mundo de la empresa hay más interés por la ética y el liderazgo -cosas que van unidas- y ahí los cristianos tenemos mucho que decir. Todo esto puede además ligarse con una reevangelización del mundo profesional. Vale la pena".