El Ayuntamiento de Pamplona rechaza retirar la exposición blasfema pero apoya al alcalde «amenazado»
El Pleno del Ayuntamiento de Pamplona no ha aprobado este viernes una propuesta de declaración de UPN que pedía que el equipo municipal retire de la exposición de Abel Azcona, en la que aparecen hostias consagradas, todo elemento que guarde relación con "la profanación cometida".
La votación no ha salido adelante al tener solo el apoyo de UPN, ya que EH Bildu, Geroa Bai, Izquierda-Ezkerra y Aranzadi han votado en contra y el PSN se ha abstenido.
El portavoz de UPN, Enrique Maya, ha señalado que el debate es sobre "quién debe actuar" en una ofensa y, en su opinión, debe ser el equipo de gobierno municipal a través de Cultura quien retire esas fotos que quedan en la exposición (en las que cientos de hostias consagradas conforman la palabra "pederastia").
A su juicio el Ayuntamiento es "garante de esos derechos y no tiene que estar esperando a ver qué dicen los tribunales" cuando "se ha ofendido y se ha ido en contra de la libertad religiosa".
UPN ha rechazado dos enmiendas, una propuesta de Geroa Bai y PSOE, en la que matizaba instar al autor a la retirada de la obra Amén por resultar ofensiva y otra presentada por EH Bildu y Aranzadi.
Por EH Bildu, Maider Beloki ha sostenido que la muestra ha desatado "varias reacciones debido a la carga simbólica" y ha denunciado que "grupos ultras y fundamentalistas religiosos ha aprovechado para lanzar una campaña política en contra del ayuntamiento y su alcalde", lo que "busca limitar la libertad de expresión y ocultar realidades durísimas que se esconden tras la polémica".
Desde Geroa Bai, su portavoz, Itziar Gómez, ha considerado que Amen es "una provocación gratuita y una ofensa a una parte importante de nuestra ciudad" y que, desaparecidas las hostias consagradas, "no tiene sentido la retirada de la exposición" ya que "es entendible que se puede pedir al autor, pero no al equipo municipal".
Por parte de I-E, Edurne Eguino ha justificado "no aceptar" ninguno de los textos planteados porque se "legitima" entrar en los contenidos de cualquier expresión artística, algo que "no podemos hacer y menos como institución pública" y ha defendido que el "papel del Ayuntamiento respecto a manifestaciones artísticas es: respeto al artista para exponer y respeto al que se ha sentido ofendido".
Desde el PSN, Maite Esporrín ha lamentado las amenazas que ha sufrido el alcalde y el artista, "son intolerables y las condenamos con la más rotunda energía", y ha defendido que la obligación del Ayuntamiento es "velar por una correcta convivencia" y así "creemos que debe ser el propio autor el que la retire", tras denunciar que "alcanzar fama agrediendo no tiene sentido".
Por parte de Aranzadi, Armando Cuenca ha indicado que el contenido polémico, las hostias consagradas, se ha solucionado "sin intervención del Ayuntamiento" y ha considerado respecto a la exposición fotográfica, que el Consistorio pamplonés, "no puede censurarlo, modificarlo o decidir si gusta o no, o ofende o no" y ha denunciado que "ha habido una campaña orquestada".
Apoyo al alcalde
Por otro lado, antes del inicio del pleno la Junta de Portavoces del Ayuntamiento de Pamplona ha acordado una declaración en la que muestra "la más absoluta repulsa y el más contundente rechazo a los insultos y amenazas de muerte proferidas al alcalde", Joseba Asiron, por parte de un grupo de personas que participaban en una concentración celebrada ayer por la tarde en la Plaza Consistorial convocada por la plataforma Respeto por Navarra.
El acuerdo, aprobado por unanimidad, considera esos hechos "un ataque directo al principio democrático y a los derechos fundamentales" y expresa "el apoyo incondicional y la solidaridad de la Ciudad de Pamplona y de su Ayuntamiento al Alcalde de Pamplona, considerando que dichos insultos y amenazas son una ofensa intolerable para todos los pamploneses y pamplonesas".
Los grupos se reafirman "en la más absoluta defensa del derecho a la Libertad de Expresión" recogido en la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
La votación no ha salido adelante al tener solo el apoyo de UPN, ya que EH Bildu, Geroa Bai, Izquierda-Ezkerra y Aranzadi han votado en contra y el PSN se ha abstenido.
El portavoz de UPN, Enrique Maya, ha señalado que el debate es sobre "quién debe actuar" en una ofensa y, en su opinión, debe ser el equipo de gobierno municipal a través de Cultura quien retire esas fotos que quedan en la exposición (en las que cientos de hostias consagradas conforman la palabra "pederastia").
A su juicio el Ayuntamiento es "garante de esos derechos y no tiene que estar esperando a ver qué dicen los tribunales" cuando "se ha ofendido y se ha ido en contra de la libertad religiosa".
UPN ha rechazado dos enmiendas, una propuesta de Geroa Bai y PSOE, en la que matizaba instar al autor a la retirada de la obra Amén por resultar ofensiva y otra presentada por EH Bildu y Aranzadi.
Por EH Bildu, Maider Beloki ha sostenido que la muestra ha desatado "varias reacciones debido a la carga simbólica" y ha denunciado que "grupos ultras y fundamentalistas religiosos ha aprovechado para lanzar una campaña política en contra del ayuntamiento y su alcalde", lo que "busca limitar la libertad de expresión y ocultar realidades durísimas que se esconden tras la polémica".
Desde Geroa Bai, su portavoz, Itziar Gómez, ha considerado que Amen es "una provocación gratuita y una ofensa a una parte importante de nuestra ciudad" y que, desaparecidas las hostias consagradas, "no tiene sentido la retirada de la exposición" ya que "es entendible que se puede pedir al autor, pero no al equipo municipal".
Por parte de I-E, Edurne Eguino ha justificado "no aceptar" ninguno de los textos planteados porque se "legitima" entrar en los contenidos de cualquier expresión artística, algo que "no podemos hacer y menos como institución pública" y ha defendido que el "papel del Ayuntamiento respecto a manifestaciones artísticas es: respeto al artista para exponer y respeto al que se ha sentido ofendido".
Desde el PSN, Maite Esporrín ha lamentado las amenazas que ha sufrido el alcalde y el artista, "son intolerables y las condenamos con la más rotunda energía", y ha defendido que la obligación del Ayuntamiento es "velar por una correcta convivencia" y así "creemos que debe ser el propio autor el que la retire", tras denunciar que "alcanzar fama agrediendo no tiene sentido".
Por parte de Aranzadi, Armando Cuenca ha indicado que el contenido polémico, las hostias consagradas, se ha solucionado "sin intervención del Ayuntamiento" y ha considerado respecto a la exposición fotográfica, que el Consistorio pamplonés, "no puede censurarlo, modificarlo o decidir si gusta o no, o ofende o no" y ha denunciado que "ha habido una campaña orquestada".
Apoyo al alcalde
Por otro lado, antes del inicio del pleno la Junta de Portavoces del Ayuntamiento de Pamplona ha acordado una declaración en la que muestra "la más absoluta repulsa y el más contundente rechazo a los insultos y amenazas de muerte proferidas al alcalde", Joseba Asiron, por parte de un grupo de personas que participaban en una concentración celebrada ayer por la tarde en la Plaza Consistorial convocada por la plataforma Respeto por Navarra.
El acuerdo, aprobado por unanimidad, considera esos hechos "un ataque directo al principio democrático y a los derechos fundamentales" y expresa "el apoyo incondicional y la solidaridad de la Ciudad de Pamplona y de su Ayuntamiento al Alcalde de Pamplona, considerando que dichos insultos y amenazas son una ofensa intolerable para todos los pamploneses y pamplonesas".
Los grupos se reafirman "en la más absoluta defensa del derecho a la Libertad de Expresión" recogido en la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
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