El Senado español aprobó la microrreforma del aborto: 3 diputados provida del PP votan en contra

Con tres votos en contra de diputados del PP, la Cámara Alta ha aprobado la ‘minirreforma’ del Gobierno de Rajoy que apenas modifica la anterior ‘Ley Aído’ sobre el aborto.

No ha habido sorpresas. El Partido Popular se ha valido de su mayoría absoluta para volver a incumplir una promesa electoral, con alguna voz discordante entre sus filas, y dar continuidad a la ‘Ley Aído’ que tanto había criticado, incluso ha llevado al Tribunal Constitucional, informa Gaceta.es.

El Pleno del Senado ha aprobado este jueves definitivamente la ‘reforma’ de la ley del aborto para impedir que las menores de edad puedan abortar sin el consentimiento de sus padres o tutores legales, promovida por el PP, con los votos en contra de al menos tres senadores de esta formación.

La modificación legislativa ha salido adelante con 145 votos a favor del PP y Unió, 89 en contra y 5 abstenciones del PAR, UPN y Ciudadanos.

Entre los senadores de Convergencia, uno ha votado a favor, cinco en contra y una se ha abstenido.

Los senadores del PP Gari Durán, Ángel Pintado y José Ignacio Palacios han votado “no” porque supone “dar por buena” la actual ley del aborto [la ley que dejó el gobierno socialista de Zapatero y que Rajoy prácticamente no toca. Nota de ReL] y es contraria al “compromiso” de su partido “con la defensa de la vida”, mientras que la popular Ana Torme ha estado presente en el hemiciclo, pero no ha votado.

Al menos dos senadores del PP se han ausentado de la votación por estar en contra de la reforma, según fuentes parlamentarias.

Entre los senadores del Partido Aragonés Regionalista (integrados en el Grupo Popular), José María Fuster ha votado en contra, mientras que María Belén Ibarz y Rosario Santos se han abstenido.

La reforma de la ley del aborto ha pasado así su último trámite parlamentario, sin ninguna enmienda, y entrará en vigor al día siguiente de su publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE).

Más de 70 senadores de la oposición habían solicitado al presidente del Senado, Pío García-Escudero, que la votación final de la reforma fuera “nominal y secreta”, de acuerdo con el artículo 97.1 del Reglamento de la Cámara Alta.

Este artículo establece que la votación nominal será secreta cuando lo soliciten en el Pleno cincuenta senadores y en las Comisiones un tercio de sus miembros.

La Cámara Alta ha rechazado esta petición al presentar los populares una solicitud para que la votación se llevara a cabo por el procedimiento ordinario público.

García-Escudero ha explicado que este mismo artículo dice también que cuando exista solicitud contradictoria para que la votación sea pública o secreta, en supuestos distintos de los contemplados en el apartado segundo del artículo anterior, la presidencia solicitará previamente a votación como cuestión incidental el procedimiento que deba de aplicarse.

Por ello, García-Escudero ha indicado que había que someter a votación el sistema de votación, tal como establece el Reglamento de la Cámara Alta. Finalmente, los senadores han decidido rechazar votar en secreto.