En Albacete exigían prohíbir un acto religioso en una plaza: el obispo reaccionó rápidamente
Desde hace varios años durante los Domingos de Pascua, las comunidades neocatecumenales de todo el mundo salen a más de 10.000 plazas a anunciar el Evangelio. Allí , los miembros de esta realidad eclesial proclaman una Palabra, evangelizan, ofrecen sus testiminios y cantan. En total, algo más de una hora en la que con los permisos municipales pertinentes hacen presente a la Iglesia en la calle.
Sin embargo, la polémica se ha desatado en la ciudad de Albacete después de que la Asociación de Vecinos de los Llanos del Águila, hayan mostrado su rechazo a estos actos exigiendo que las manifestaciones religiosas se produzcan dentro de las iglesias.
El presidente de la asociación vecinal, Juan Luis Martín, aseguró que tras la queja de algún vecino acudió el mismo un domingo a comprobarlo. En declaraciones a El Digital de Albacete afirmaba que comprobó que “efectivamente se realizaba en la vía pública un acto religioso con una especia de altar, imágenes y megafonía”. En realidad, únicamente hay una cruz, un ambón para poder dejar la Biblia y algún icono religioso. Tras esto acudió a la Policía Local, que le indicó que todo “estaba autorizado” por el Ayuntamiento.
Prohibir actos de carácter religioso en la vía pública
No contento con la decisión del consistorio, Martín llamó a que “si el Ayuntamiento estima oportuno hacer este tipo de actos, lo haga en recintos municipales cerrados, donde quien quiera pueda ir”. Además, exigió que no se permitan actos en la vía pública que “lleven consignas de tipo religioso, moral o ético”.
Rápidamente, el obispado de Albacete, diócesis cuyo obispo es Ángel Fernández Collado, emitió un comunicado claro y contundente sobre esta polémica generada por esta asociación de vecinos.
En primer lugar recuerda la ley vigente al afirmar que “la expresión pública de la fe es una de las dimensiones del derecho fundamental de Libertad religiosa recogida en nuestra Constitución y desarrollada en la Ley Orgánica de Libertad religiosa”.
"Presupuesto absolutamente restrictivo de la libertad"
“Todos los ciudadanos, también los cristianos, pueden libremente, en el respeto a las leyes y sin otra limitación que el orden público, usar los espacios públicos también para celebrar y expresar su fe públicamente”, afirma el comunicado.
Además, el obispado recuerda que “pretender limitar la celebración y el anuncio de la fe de los cristianos al ámbito de lo privado, llegando a exigir que solamente se haga en espacios cerrados, es una afirmación que no encuentra ningún fundamento en la legislación española ni en el derecho internacional. Es un presupuesto absolutamente restrictivo de la libertad”.