Las familias que reciben ayuda de Cáritas por primera vez en Madrid se triplican en el último mes
La crisis socio-económica derivada de la pandemia de coronavirus ya se palpa en miles de personas, y todo apunta a que esto no acaba más que empezar. Así lo atestigua Cáritas, que informa que en el último mes (entre el 15 de abril y el 14 de mayo) el número de familias que ha pedido por primera vez ayuda en Madrid a esta institución de la Iglesia se ha triplicado.
De este modo, el programa de Acogida y Asistencia de Cáritas ha ayudado a 2.354 familias, cuando en el mismo periodo del año anterior habían sido 679.
Gran parte de la ayuda es para alimentos
Tal y como informa esta entidad católica, en la región de Madrid han aumentado en este tiempo un 94% el número de ayudas económicas entregadas. De estas ayudas, la mayoría estaban destinadas a la compra de alimentos (68 por ciento) y otra cantidad a pagos relacionados con la vivienda (22 por ciento).
Especialmente grave, destacan desde Cáritas, es la situación de los distritos del sur, con una mayor tasa de pobreza. Respecto a las características de las personas que reciben las ayudas económicas, en los meses del estado de alarma la organización ha detectado un aumento “significativo” de las personas con un trabajo por cuenta ajena, principalmente a causa de los Expedientes de Regulación de Empleo (ERTE) y no haber percibido aún prestaciones.
También ha crecido el número de ayudas para personas menores de 30 años y personas de origen extranjero que, según Cáritas, “se encuentran entre las más damnificadas por esta crisis”. El servicio de atención telefónica de Cáritas está recibiendo más de 600 solicitudes de ayuda diarias.
Además, la organización ha mantenido la atención presencial para aquellas peticiones “urgentes de extrema necesidad en las que es imprescindible un contacto directo con la persona, siguiendo las indicaciones sanitarias para reducir riesgos de contagio”. Desde que se declaró el estado de alarma, cerca de 3.000 personas se han puesto en contacto con Cáritas para hacer voluntariado presencial y telefónico.