Lunes, 23 de diciembre de 2024

Religión en Libertad

Carlos Ruiz Cortari, de la AVT

«No he oído a ningún etarra pedir perdón de forma personal a las víctimas a las que se causó daño»

Ruiz Cortadi habla de la tregua de ETA, la Iglesia en el País Vasco y el sentido de justicia hacia las víctimas del terrorismo.

Eusebio Nuño Romero/ReL

Carlos María Ruiz Cordati
Carlos María Ruiz Cordati
No es fácil encontrar en la vida pública española personas nobles, cabales, sinceras y bien formadas, tanto intelectual como moralmente. Todo un caballero cristiano, un vasco de los de verdad, de los que te puedes fiar si te llama amigo porque no habla la boca sino la cabeza y el corazón.

Pocos testimonios humanos y cristianos tan valiosos como el suyo para acercarnos a una visión certera del drama del terrorismo. Desde septiembre de 2010 es delegado en Madrid de la Asociación de Víctimas del Terrorismo.

- A su hermano Eloy le ametralló la ETA. ¿Qué consecuencias le trajo?
- Mi hermano Eloy, que se sentía muy vasco y muy español, fue ametrallado además con munición que al entrar en el cuerpo se abre y destroza por donde pasa con mil fragmentos. En el barrio de Repélaga iba a dejar a su novia y allí le esperaban para asesinarle. No lo lograron pero tuvo que abandonar su trabajo, su vida y su tierra a la que tanto quería. Fue uno más de los 200.000 vascos desterrados por el terror. Trabajó para una compañía de comunicaciones en Radio Griñón, en Canarias, en Gijón, y en Vigo hasta su muerte en La Coruña.

A un juez de la Audiencia Nacional amigo suyo le recordaba mi hermano Eloy el despropósito que sufrió después. Sus asesinos frustrados, los que le ametrallaron, fueron amnistiados sin ni siquiera haber sido juzgados, gran disparate, al menos jurídico.

- ¿Se puede negociar todo?
- No

- ¿Es lícito moralmente negociar todo sin excepción?
- No. No se puede negociar nada. Que se rindan, pidan perdón, entreguen las armas y reparen el daño causado es lo que hay que exigir.

- ¿Se puede y/o se debe renunciar a la memoria, dignidad y justicia? ¿El fin puede justificar de forma absoluta los medios?
- Hay que buscar la verdad, 1000 muertos, los heridos, los destrozos causados, 200.000 vascos desterrados de su tierra. Todos ellos víctimas por España y por la democracia. Por dignidad no podemos olvidar lo inolvidable. La Justicia no se puede basar en la injusticia. Además primero es la justicia antes que la misericordia.

- Resulta obligado plantear una reflexión sobre la postura de parte de la Iglesia en el País Vasco en estos años. Tristemente, ha tenido que acudir a muchos funerales y muchos homenajes a muchos muertos. ¿No resulta deformativo de la moral restar toda la gravedad que tiene un acto perverso equiparando víctimas y terroristas asesinos?
- Si distinguimos la Iglesia, conjunto de pastores y fieles, del papel de algunos de estos pastores y fieles el juicio será más acertado y más verdadero. Sin duda, a mi juicio, ha habido pastores poco caritativos con las víctimas y se ha olvidado lo importante que es educar a la juventud en el amor y en la verdad y, en lugar de eso, se ha permitido que se les adoctrine en la mentira sobre la Historia y en el odio a los que no piensen como ellos

- Como cristiano, ¿cómo ha vivido este drama durante estos años? Y ahora, ¿qué le parecen los últimos pronunciamientos episcopales?
- He visto que se han ocupado púlpitos para expresar opiniones políticas de apoyo al nacionalismo y no Evangelio, que ha habido una ambigüedad no digna de pastores, que han faltado palabras claras e iluminadoras, que no se ha pedido con la misma fuerza a los asesinos que se arrepientan, pidan perdón y reparen su crimen como a las víctimas se las ha pedido generosidad, por no decir de las veces que se ha igualado el sufrimiento de las víctimas con el que podían tener los familiares de los asesinos por estar estos encarcelados.. .

Además de esto, he tenido que elegir la iglesia donde no encontrarme con sacerdotes que defendieran el nacionalismo antes que el Evangelio y he tenido que ver y lamentar que haya habido iglesias que se hayan negado a celebrar funerales por las víctimas.

Los últimos pronunciamientos episcopales reflejan un cambio positivo, aún insuficiente con respecto a lo anterior, pero es difícil centrar de nuevo la evangelización cuando durante tantos años se ha sembrado otra cosa.

- Es duro perdonar a los asesinos de un ser querido, pero, ¿para poder perdonar es importante que alguien reconozca su culpa, pida perdón, haga propósito de la enmienda y procure reparar tan terrible falta?
- Insisto que es imprescindible que se reconozca el daño y se pida perdón. No he oído a ningún etarra pedir perdón de forma personal a las víctimas a las que se causó daño. Sin conversión, sin cambio, no hay nada serio ni definitivo. Conviene repasar la Historia: Cuando se decretó la amnistía en la transición y 1000 etarras fueron puestos en libertad, sin que hubieran mostrado arrepentimiento ni pedido perdón, 600 de ellos volvieron a cometer atentados, que no hubieran cometido de haber seguido en prisión.

- ¿Se ha hecho todo lo que se podía y debía hacer, para acabar con el terrorismo, desde el poder? ¿Se está jugando esta carta para, como dicen algunos, llegar al poder y/o permanecer en él?
- Se ha cometido a mi juicio el error de alimentar aquella desdichada frase de Arzalluz sobre que “unos movían el árbol y otros recogían las nueces”. A cada atentado seguían cesiones que procuraban “contentar” a la bestia para calmar su sed de sangre, pero que lejos de eso profundizaban en el método al ver los etarras que a la violencia y el terror se respondía con cesiones y debilidad.

Y, por otro lado, como señala, no creo que Zapatero, aunque lo pretendiera, juegue la carta de la paz y la cesión de la violencia con éxito pues, ni aunque eso ocurriera, Zapatero evitará el descalabro electoral. En este sentido, y es una desgracia, la mayor parte de los políticos han sido cortoplacistas y han buscado réditos inmediatos antes que plantear medidas políticas de calado y largo alcance, económicas, sociales, culturales, educativas, etc... que posibilitaran un fin de la violencia, aunque fuera más poco a poco. Y no se ha tenido en cuenta que, aún en democracia, es un error funesto pensar que todas las ideas son igualmente respetables y defendibles.

- ¿Qué opinión le merece a la AVT el último comunicado etarra? ¿Plantea la AVT alguna manifestación? ¿se sumará a alguna convocada?
- Es más de lo mismo, una treta para conseguir tiempo y meterse en las elecciones de Mayo sin mayores problemas y, desde las instituciones tener recursos, influencia, y seguir en lo mismo de siempre.

Ya se esperaba el comunicado aunque se esperaba más largo y quizás de otra manera, el tiempo pronto nos lo dirá… En cualquier caso, no parece haberse reparado mucho en el hecho de que se cite a Francia expresamente en el comunicado reclamándole territorios y no me consta haber leído ni preguntas ni respuestas sobre ello a Sarkozy.

La AVT, por otro lado y como no podía ser de otra manera, está del lado de las víctimas y procura apoyarlas siempre, pero eso no significa hacer seguidismo de planteamientos personalistas desde los que se plantean iniciativas, sin contar con nadie, mientras no se atienden los llamados a intentar un manifiesto conjunto.

La AVT ha expresado su opinión en diversos medios cuando ha sido requerida, se ha pronunciado y si lo considera oportuno realizará las acciones que considere más idóneas, incluyendo una manifestación siempre que se considere que es el momento adecuado para España y para las víctimas.

Insisto, por ello, que la próxima manifestación de Alcaraz no tiene el apoyo de la mayoría de las víctimas ni desde luego de AVT.

- La paz es obra de Zapatero? ¿o más bien de un pueblo, regenerado y regenerador, que es necesario formar y educar en la verdad, la justicia y el amor?
- Naturalmente, la paz no será la obra de Zapatero sino del pueblo español trabajando por ella. Para un cristiano, principalmente, un don de Dios.
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