Multitudinaria celebración de la misa esta mañana
La presencia de miles de fieles obliga a Patrimonio Nacional a abrir el Valle de los Caídos
Unos 2.000 vehículos han colapsado las carreteras de acceso a El Escorial, provocando atascos de hasta 10 kilómetros.
Miles de personas han acudido hoy en masa al Valle de los Caídos para asistir a la misa de los benedictinos prohibida por el Gobierno «por seguridad». Tantas se han desplazado hasta El Escorial, que han provocado atascos de unos diez kilómetros y Patrimonio se ha visto obligado a permitir la entrada al valle. Los monjes han contabilizado unos 2.000 vehículos.
«Con el lío que se ha formado se ha decidido abrir el valle porque se estaban bloqueando todos los accesos», explica uno de los agentes desplazados hasta el lugar. Algunos fieles han aparcado a diez kilómetros del Valle y llegan andando hasta la explanada donde se ha celebrado la eucaristía, que ha comenzado con una hora de retraso.
El pasado viernes Patrimonio se reunió con los benedictinos para adoptar una solución, pero la cita terminó sin acuerdo. Los monjes no aceptaron las propuestas del Gobierno y decidieron mantener la misa.