La Iglesia Católica en Inglaterra no se resigna y exige al Gobierno de Boris Johnson que recapacite su decisión de no permitir abrir las iglesias ni siquiera para la oración individual hasta al menos el 4 de julio. Y así lo ha constatado claramente el cardenal Vicent Nichols.

En una entrevista en la BBC Radio, el arzobispo de Westminster y presidente de la Conferencia Episcopal de Inglaterra y Gales ha pedido al Gobierno que muestre “un poco más de sensibilidad” hacia los grupos religiosos. Recordó además que la Iglesia Católica ya ha presentado un plan totalmente detallado para abrir las iglesias de manera segura y que estaban “acordados” don el Sistema de Salud de Inglaterra.

La reapertura de los templos

“En estas últimas semanas hemos sido creativos, hemos sido fieles", afirmó el cardenal Nichols, tal y como recoge Catholic Herald. “La misa se ha celebrado todos los días en las iglesias católicas. La gente se ha unido online, pero hay algo, un gran sentimiento en las comunidades religiosas de querer volver a una práctica más completa de su fe, siempre y cuando podamos hacerlo de manera segura”, agregó.

Según los planes de los obispos, las iglesias reabrirían inicialmente para la oración privada e individual. En su opinión, esto “significaría una rutina de supervisión, una rutina de distanciamiento social, una rutina de limpieza. Y todo eso creemos que podemos hacerlo".

Diferenciar las necesidades de cada confesión y religión

Nichols también pidió una mayor comprensión de las prácticas diferentes de las diversas religiones. "Una oración personal e individual en una iglesia católica no es algo que se haga mucho en las iglesias pentecostales, que tienden a concentrarse en grandes reuniones, y no es lo que se hace en las mezquitas donde las personas rezan juntas", explicó el cardenal Nichols.  Por ello, dijo que se necesita para cada caso “un poco de pensamiento diferenciado".

Para explicarlo hizo una analogía con el deporte. Dijo que tanto el tenis como el fútbol son deportes, pero en estos momentos de pandemia jugar al tenis es posible y un partido de fútbol no lo es. “Estamos hablando de la práctica de la fe, pero también en esto necesitamos diferenciar para que las cosas se hagan de manera segura”, añadió.

Las misas públicas fueron suspendidas en Gran Bretaña el 21 de marzo. Un par de días después, el gobierno ordenó el cierre de todos los edificios religiosos, incluso para la oración privada.

Las "necesidades espirituales" de los católicos

El pasado lunes, el Gobierno emitió un documento sobre las fases del desconfinamiento, pero apenas mencionó lugares de culto pero aclaraba que no abrirían hasta julio. La Conferencia Episcopal de Inglaterra y Gales criticó estas recomendaciones, diciendo que “el momento y la manera de la apertura de las iglesias toca profundas sensibilidades y necesidades espirituales. El documento y las declaraciones del Gobierno no reconocen esto”.

Tenemos planes, tenemos preparación y conocemos la profundidad de los sentimientos de las personas y sus necesidades para que puedan vivir su fe bien y con seguridad”, indicó el cardenal Nichols al programa Today.

"Se está haciendo un gran sacrificio espiritual profundo y, de acuerdo, estamos dispuestos, pero queremos saber que somos apreciados y las sensibilidades reconocidas", concluyó.