El socialista Félix Bolaños cumple un año como Ministro de la Presidencia y Memoria Democrática del Gobierno de España. Y lo ha celebrado visitando al Papa Francisco, siete días antes de las elecciones en Andalucía.

Bolaños ha acudido al Vaticano acompañado de seis colaboradores y la embajadora ante la Santa Sede, Isabel Celaá. Bolaños fue el encargado de organizar el polémico traslado de los restos de Francisco Franco del Valle de los Caídos al cementerio de Mingorrubio, y Celaá lleva apenas medio año como embajadora en el Vaticano, siendo más conocida por la "ley Celaá" de Educación, que limita la clase de religión, torpedea a la escuela diferenciada y especial y ha causado el enfado de la escuela católica y concertada de toda España. También alcanzó notoriedad proclamando que "los niños no son de los padres"... como si sugiriera que eran del Estado.

Bolaños se ha reunido después con la prensa española y ha asegurado que los 50 minutos compartidos con el Pontífice fueron algo "inspirador".

«Me siento muy honrado de haber sido recibido por su Santidad, de haber tenido una conversación de casi una hora a solas, y he constatado su profundo conocimiento de las cuestiones de España, su cercanía y cariño hacia nuestro país. Por eso, por mi parte he transmitido al Papa Francisco el cariño de los españoles y las españolas», ha asegurado nada más salir.

Desfile de cargos socialistas (y una comunista) por el Vaticano

Se da la circunstancia de que el Papa recibió hace poco más de 6 meses también a Yolanda Díaz, militante del Partido Comunista de España y desde hace un año vicepresidenta segunda del Gobierno de España. Y antes Francisco ya mantuvo un largo encuentro con el presidente, Pedro Sánchez, el 24 de octubre de 2020. Además, saludó brevemente en el Vaticano, en mayo de 2019, a la vicepresidenta de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, en un encuentro de la Pontificia Academia de Ciencias Sociales y a la entonces vicepresidenta Carmen Calvo en octubre de 2019 en el consistorio de creación de nuevos cardenales.

Tantas visitas de políticos españoles son como poco extrañas. El Papa suele recibir a solas sólo a Jefes de Estado y de gobierno, y en algunos casos, a vicepresidentes. Bolaños sólo es ministro. Él ha declarado que cuando supo que su ministerio se encargaría también de la relación con la Iglesia Católica pidió el encuentro a través de la embajadora Celaá.

Sin tratar cuestiones polémicas

El Vaticano no suele explicar de qué se habla en estos encuentros a puerta cerrada, y sólo a veces hace desmentidos. Así, la fuente para explicar el encuentro es el invitado.

Bolaños ha asegurado que declaró al Papa "la voluntad del Gobierno de continuar la senda del diálogo con la Iglesia católica española para resolver los asuntos de interés común, como hemos demostrado en las recientes fechas. Hay continua interlocución con el presidente de los obispos, Juan José Omella, y queremos apostar desde el gobierno en ese diálogo en temas de interés común".

Detalló que "se está trabajando bien" en los grupos de trabajo entre Gobierno y Conferencia Episcopal. Esos grupos tratan de 3 temas: las inmatriculaciones de propiedades eclesiales (tema que se considera ya concluido), la situación de la fiscalidad de la Iglesia y las peculiaridades de la Obra Pía, unas instalaciones y fundaciones que financia el Estado español en Italia pero tienen significación religiosa.

Eutanasia, aborto, pero "nos inspiran los mismos valores", dice

Bolaños es ministro de un Gobierno que ha implantado la eutanasia, recortado la clase de religión, ataca a la escuela diferenciada y ahora amplía el aborto una vez más, en España y desde las instituciones europeas. Pero eso no le impide declarar: "Nos inspiran los mismos valores: diálogo, solidaridad, ayudar a quienes tienen más dificultades, a quienes están en peor situación, los más desfavorecidos. Son valores que inspiran la labor del gobierno y allí he constatado cercanía y sintonía».

Bolaños ha mencionado el encargo del Parlamento al Defensor del Pueblo de que investigue los abusos a menores en la Iglesia Católica, y sólo en la Iglesia Católica. Es un caso insólito, algo que ningún otro gobierno del mundo ha realizado y que además va contra el sentido del Defensor del Pueblo, cuyo deber constitucional (como explica el jurista Eugenio Gay) es investigar a las Administraciones y carece de toda jurisdicción sobre entidades civiles o privadas.

Pese a todo esto, Bolaños ha proclamado: "Lo importante es proteger a las víctimas. Es muy importante que colabore la Iglesia, que se pongan los medios y conseguir ayudar a las víctimas". Pero... ¿por qué sólo en entornos de la Iglesia Católica? Varias asociaciones creen que se trata simplemente de una maniobra para desprestigiar a la Iglesia sin hacer nada útil con las víctimas ni con los abusos en España.

Bolaños también ha explicado al Papa que en España, en lo que se refiere a refugiados ucranianos, "hemos recibido 120 mil, y pese a la lejanía, España es el quinto país que más personas ha acogido". (Sería interesante ver cuántos se alojan en entidades ligadas a la Iglesia, como casas rurales, campamentos de colonias, noviciados, etc...)

El ministro Bolaños también ha enumerado ante el Pontífice medidas como el ingreso mínimo vital, la subida del salario mínimo, el bono eléctrico y el aumento de las becas para estudiantes con menos recursos. Y le ha invitado a viajar a España. «Tiene abiertas las puertas de nuestro país para cuando quiera», le ha dicho. «Ha sido un honor y estoy muy agradecido», ha concluido.

Regalos y detalles

Félix Bolaños ha regalado al Papa una edición moderna, de Patrimonio Nacional, de 'Cantigas' de Alfonso X, «que son canciones dedicadas a la Virgen y realizadas en el escritorio del Rey Alfonso X, a quien se le atribuye el impulso de la Escuela de Traductores de Toledo, expresión de la convivencia de las tres religiones monoteístas». El pontífice ha apreciado que la han elaborado alumnos de la Escuela Taller de Encuadernación Artística de Patrimonio Nacional, creada para la inserción laboral de personas jóvenes desempleadas.

Félix Bolaños también le ha llevado productos «del campo español». Se trata de azafrán artesanal de Villafranca de los Caballeros (Denominación de origen La Mancha), dos botellas de aceite de oliva de dos cooperativas de Jaén, y plátanos cultivados en la isla de La Palma, para poder hablar al Papa del "comportamiento ejemplar y solidario del pueblo palmero durante la erupción del volcán".