Una investigación de dos años ha conducido al profesor Gabriel Songel, catedrático de Diseño en la Universidad Politécnica de Valencia al descubrimiento de un manuscrito que contiene la referencia más antigua conocida al Santo Cáliz de la catedral de Valencia. Se trata del relicario de San Juan de la Peña, fechado en el siglo XI, tres siglos anterior al documento en el que Martín el Humano lo reclama en 1399 al monasterio de San Juan de la Peña.
Según informa Efe recogiendo las declaraciones del profesor Songel, el manuscrito hallado contiene un acróstico escrito con motivo de la coronación de Pedro I de Aragón y compuesto con las letras del texto siguiendo un esquema geométrico que significaría Calix Lapis Exillis, donde Lapis Exillis es la forma en la que el poema Parsifal, de Wolfram von Eschenbach, se refiere en 1210 al Santo Grial.
El Santo Cáliz de la catedral de Valencia.
Songel descubrió el esquema geométrico por deducción y semejanza con la composición de las marcas de los reyes y emperadores de la época donde se escondían los nombres de los autores o el nombre de quien había encargado la copia. La conexión geométrica más directa, explica, son las firmas papales llamadas Bene Valete: "Es, por tanto, una citación implícita y una referencia directa a que el cáliz de piedra preciosa se encontraba en Huesca, siguiendo con la tradición laurentina. De hecho, otro de los acrósticos relaciona al Papa Sixto con San Lorenzo y Huesca, o personajes como Donato Abad o el mismo papa Urbano II".
El Santo Cáliz de la Última Cena se venera en la Catedral valenciana desde el siglo XV y desde 1916 en la capilla del Santo Cáliz, antigua Aula Capitular de la Seo. Respecto a su autenticidad, un reciente estudio de la doctora Ana Mafé García, historiadora del Arte, concluyó que al 99,9% puede afirmarse que la reliquia es el Santo Grial utilizado por Jesucristo en la Última Cena, sobre todo tras la identificación de signos en la copa de ágata que la autentifican como hebrea.
El acróstico ahora descubierto se encuentra insertado en un Glosarium conservado en el archivo de la Real Academia de la Historia, en Madrid, y según Songel "lo sorprendente es que la imagen del texto no se había publicado hasta ahora". Encontró además que la retícula que organiza los bloques de texto contiene con total exactitud el diseño del Santo Cáliz, tal y como se conoce actualmente, lo cual, sostiene, "corroboraría que el cáliz ya se había compuesto sobre la copa original en el siglo XI".
Esta investigación ha sido revisada por expertas en codicología, como la académica Elisa Ruiz García, de la Real Academia de la Historia, y Daniel Benito, catedrático de Historia del Arte de la Universidad de Valencia y conservador del Museo del Patriarca. También han examinado el estudio Jaime Sancho, canónigo de la catedral, y Juan Miguel Díaz Rodelas, miembro de la Pontificia Comisión Bíblica Internacional y decano de la Facultad de Teología San Vicente Ferrer.
Éste y otros estudios del profesor Songel se incluirán en el libro El cáliz revelado, que será publicado próximamente por la editorial Tirant lo Blanch.