¿Qué es ser progre y ser carca en la iglesia española?

Hoy me voy a permitir escribir un post sólo a medias. La semana pasada comía con un conocido bloguero de nuestra querida Religión en Libertad, y me comentaba cómo a él le había animado enormemente el saber que le leen en todas partes del mundo.

Aunque todavía no tenemos estadísticas por países- que espero que pronto lleguen- por los comentarios y la interacción vamos viendo cómo nos lee gente de todas partes del mundo, y no sólo españoles.

Por ejemplo a mi me leen en lugares tan dispares como la República Dominicana, donde está una asidua lectora Sabrisky a quien nunca agradeceré suficientemente el haber difundido el blog entre sus conocidos, Roma donde anda un sacerdote español que tuve el gusto de conocer en persona hace poco, o los Estados Unidos.

 También hay gente  que nos lee en mil partes de Latinoamérica, y todos son muy bienvenidos. Ojalá este blog y otros siga siendo un punto de encuentro y un motivo de amistad y hermandad dentro de la Iglesia.

El caso es que hace poco me han preguntado qué es eso de progres y carcas. Lo que en España nos parece tan obvio resulta que otros sitios no es en absoluto conocido.

Para empezar el término carca no se usa más que en España, por lo que difícilmente lo entenderán el resto de hispanohablantes.

Así que, dada la necesidad de explicación para los que nos leen,  me he propuesto preguntar a los lectores de España qué es ser progre y carca para ellos.

El experimento es interesante, pues la Iglesia española está muy aquejada de una más que cierta oposición y antagonismo entre los que se consideran progres y los que se consideran carcas.

¿Cómo nos explicaríamos a nosotros mismos? ¿Cómo le explicaríamos a alguien de fuera en qué consiste ser progre y en qué consiste ser carca en materia eclesial? ¿Es Religión en Libertad progre o carca?

Se puede hablar de alzacuellos, de curas obreros, de liturgias decimonónicas o postconciliares…la pregunta está servida.