La del alcalde de Callosa de Segura (Alicante, España) es ya una dinámica enloquecida por el sectarismo y a costa del erario público. No contento con arrancar la Cruz de la plaza del pueblo despreciando la oposición vecinal, y tras multar a la mujer que la proyecta en forma de luz desde su domicilio sobre la fachada de la iglesia, el socialista Fran Maciá ha decidido «contraprogramarla» con focos que la anulen por potencia.