El 14 de septiembre, festividad de la Exaltación de la Santa Cruz, el cardenal Bechara Rai, patriarca de los católicos maronitas, bendijo la estatua del primer santo del país, en una ceremonia cuyas horas previas recoge este vídeo. Desde el Monte Líbano, San Charbel protege ahora a la nación y se erige en modelo de vida monacal y sacerdotal. «Su existencia entera estuvo completamente centrada en la celebración de la misa, la oración silenciosa ante el Santísimo Sacramento y la práctica heroica de las virtudes de pobreza, castidad y obediencia. Que él nos haga comprender, en un mundo fascinado por la riqueza y las comodidades, supremo de la pobreza, la penitencia y el ascetismo para liberar al alma en su ascenso a Dios», proclamó Pablo VI al canonizarlo en 1977.