Se titula Diospa Churin {El Hijo de Dios}, y lo interpretan los acólitos de la parroquia El Sagrario del departamento de Huancavelica (Perú). Es una composición rítmica y feliz que repite continuamente «¡Alegrémonos!» ante el nacimiento del Señor. Pincha aquí para leer la letra en quechua y su traducción española.