A las dominicas del monasterio de Taulignan, en el sureste francés, no les faltan ni vocaciones jóvenes ni trabajo. Son once monjas que siguen la norma de Santo Domingo de "alabar, bendecir, predicar" en los siete oficios litúrgicos del día y en sus labores agrícolas. Aunque la región es conocida por sus vinos, ellas se dedican a las plantas aromáticas, como la verbena, la melisa, la lavanda, el espliego, el romero, el tomillo... ¡los olores de la Provenza! Con ellos fabrican, en su propia destilería, aceites esenciales e hidrosoles, así como diferentes tisanas e infusiones. Puedes adquirir todos estos productos a través de Divine Box.