El 11 de febrero de 2024 el Papa Francisco canonizará a la argentina María Antonia de Paz y Figueroa, conocida como Mama Antula. En 1760, reunió a un grupo de mujeres jóvenes para ejercer la caridad colaborando con jesuitas. Cuando Carlos III los expulsó de todos los dominios hispánicos, ella viajó de ciudad en ciudad por el nordeste argentino promoviendo los ejercicios espirituales al estilo de los jesuitas. Ya en vida se le atribuían milagros.
En el vídeo, habla el protagonista del milagro que permite canonizarla. Se trata de Claudio Perusini, que había sido alumno del Papa Francisco. En 2017 sufrió un accidente cerebrovascular que lo dejó en estado vegetativo. Pero un amigo jesuita llevó a la clínica una estampita de Mamá Antula y empezó a rezarle pidiendo un milagro. De repente, su condición -llevaba 28 días en estado vegetativo- se revirtió. Su mejoría era notable. Después de unos meses de fisioterapia, Claudio recuperó todas sus funciones vitales. Esta sanación no tiene explicación médica y es el milagro que ha llevado a su canonización. Claudio acudirá a la canonización a Roma con su esposa y sus dos hijos.