"Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados", dijo Jesús (Mateo 5,4). La cantante católica Kairy Marquez pone música a esa promesa de Jesús, y su reciente videoclip lo recoge con varias historias: hay lágrimas en nuestras vidas, pero Dios las acompaña y consuela.
Kairy, dominicana afincada en Estados Unidos, dice que a los 15 años sintió «un toque de Dios» que le hizo sentirse «amada, protegida y sostenida por Él». Empezó entonces a orar con seriedad y desde los 16 años sirve a Dios con la música.